Los vecinos de Sopuerta, pequeña localidad de Vizcaya, han emprendido su particular batalla contra la Diputación. Las autoridades vascas quieren abrir, en el conocido Palacio de Quintana, un nuevo centro de menas, y el municipio se niega. Tal es la negativa, que un vecino ha llegado de ofrecer un millón de euros para comprar el palacete y evitar así la llegada de menas a Sopuerta.
El edificio escogido no es casualidad. Este palacio de tres plantas y más de 850 metros cuadrados llegó a albergar, hace décadas, una residencia de ancianos, pero desde hace más de diez años se encuentra sin actividad y en venta. A la recogida de firmas del municipio, que ya alcanza 1.700 —en un pueblo de apenas 2.500 habitantes—, se ha sumado ahora la oferta millonaria de uno de los vecinos.
El rechazo a la apertura de un centro de menas se ha dado también en la calle. Exigiendo más información tanto al Ayuntamiento —gobernado por EH Bildu— como a la Diputación —en manos del PNV—, los vecinos «no han tenido éxito» en su queja: «Hay mucho oscurantismo», explican temerosos ante la llegada de un centenar de extranjeros a la localidad.
La dueña del palacete, sin embargo, sí parece dispuesta a venderlo a un particular y evitar así la apertura de un centro de menas. Precisamente en esa búsqueda de inversores uno de los vecinos ha llegado a ofrecer un millón de euros, parra comprar el inmueble y la finca de más de 13.000 metros cuadrados de terreno. «Yo no busco protagonismo. Quiero mucho al pueblo y pretendo ayudar a todos», ha explicado el vecino.
La negativa del pueblo gobernado por Bildu ha hecho que los vecinos elaboren un informe contra la idoneidad del proyecto: «Pone en peligro el bienestar del pueblo, de las personas que los acogen y de los propios menores». Una medida, sin embargo, que el principal partido del Ayuntamiento ve con buenos ojos. Los vecinos, a falta de comprar el palacete, pensarán mejor su voto en las próximas elecciones.
