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En el año en que el país organiza los Juegos Olímpicos

El balance de la Nochevieja «multicultural» en Francia: 40 policías heridos, casi 400 detenciones y 745 vehículos quemados

Policía francesa en París. Europa Press

La sociedad multicultural crea sus propias tradiciones y arrumba otras que no se ajustan a los nuevos tiempos. Desde hace décadas en Francia los símbolos cristianos han sido expulsados del espacio público porque se oponen a la laicidad de la república. La nueva tradición del solsticio de invierno, surgida en Estrasburgo en los años 90 del siglo pasado, es la quema de coches en Nochevieja. Como sucede año tras año, el poder de la república no puede nada contra ella.

La Nochevieja pasada, los vehículos quemados por bandas de gamberros y de delincuentes habituales fueron 745, más que las 690 unidades registradas en la madrugada de 2022 a 2023, pero menos que los 874 del año anterior.

En varios años los coches destruidos superaron el millar. En la noche de San Silvestre de 2012 a 2013 el número fue de 1.193. En la de 2019 a 2020 fueron 1.316. Y en el paso de año de 2020 a 2021, el primer invierno de la pandemia, los incendiarios marcaron su récord, con 1.457.

El ministro del Interior francés, Gérard Darmanin, que reclama la disolución de la asociación Academia Cristiana, declaró el 1 de enero que la Nochevieja había sido «una noche tranquila». Los policías desplegados en todo el país fueron unos 90.000. Pero semejante fuerza no amedrentó a los gamberros, que suelen provenir de los suburbios de las ciudades. Se registraron 40 policías heridos, hubo 389 detenciones y 745 vehículos quemados.

Darmanin, que es ministro de Interior desde 2020 y, antes de adherirse al partido liberal de Emmanuel Macron, militó en Los Republicanos, el PP francés, mintió con descaro a sus compatriotas. Afirmó que los automóviles destruidos fueron un 10% menos que el año anterior, cuando la realidad es que la cifra ha aumentado en un 8%, pues 745 es superior a 690.

Gracias al servicio de X en el que los lectores pueden desmentir bulos aportando datos, los usuarios de la red social saben que el Marlaska francés miente tanto como su homólogo español. Sin duda éste es uno de los motivos por los que Thierry Breton, otro político francés, comisario de Comercio Interior y Servicios, ha abierto un procedimiento contra X por permitir «la desinformación«.

Por el contrario, la prensa francesa, tanto la de papel de pago como la digital, ha repicado la mentira de Darmanin sin corregirla. Los periódicos que se editan en París ni mencionan las quemas. Varios de ellos prefieren dedicar sus portadas a los Juegos Olímpicos que se celebrarán entre julio y agosto en la capital francesa. Pareciera que hay una consigna de que la realidad perturbe la competición y los negocios que trae.

En el ocultamiento participan también los corresponsales españoles de ABC, El Mundo, La Vanguardia, El País, la agencia EFE, y las radios y canales de televisión generalistas. Ninguno de ellos ha informado de esta «tradición republicana». Los periódicos prefieren dar espacio a los pleitos de Donald Trump, las reformas legales de Javier Milei o el último terremoto en Japón.

Otras tradiciones de la Francia «pluralista y diversa» a las que los ciudadanos honrados están teniendo que adaptarse son los apuñalamientos, realizados casi siempre por inmigrantes ilegales o musulmanes, las amenazas a los judíos y el cierre de iglesias y la apertura de mezquitas.

Sin embargo, los franceses siguen votando a los partidos que permiten que ocurra toda esta violencia y, además, la normalizan. Quizás en las elecciones al Parlamento Europeo las cosas cambien.

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