La visita de la presidente de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, a España con motivo de la inauguración de la presidencia española del Consejo ha servido de ocasión a la dirigente europea para comentar la situación política ante las próximas elecciones.
La presidenta de la Comisión se ha posicionado a favor del centro político, afirmando durante una rueda de prensa junto al presidente Pedro Sánchez celebrada en el Museo de las Colecciones Reales: «Nosotros, los grupos democráticos de centro, tenemos que demostrar que tenemos las ideas muy claras». La presidenta, que habló en primera persona al considerarse parte del centro político, incluyó entre sus declaraciones una condena de lo que considera extremismo político «tanto a derecha como a izquierda», alertando sobre su regreso al campo político. Entre otras cosas, previno sobre un supuesto recelo al cambio de las alternativas políticas que no forman parte del centro y recomendó seguir trabajando a favor de políticas con resultados reales; para las cuales tomó como ejemplo el cambio climático que, según precisó, constituye un hecho irrebatible.
La política medioambiental de la Comisión ha dado pie a numerosas críticas y ataques desde varios frentes políticos, incluido el propio Partido Popular Europeo (grupo político de von der Leyen) que, bajo la dirección de Manfred Weber, el que fue rival de la actual presidenta en 2019 cuando ambos se disputaban la presidencia de la Comisión Europea, ha manifestado su discordancia con algunas propuestas legislativas de la Comisión como la Ley para la Restauración de la Naturaleza; una ley que fue rechazada en varias comisiones parlamentarias con el voto de Conservadores y Reformistas Europeos (grupo de VOX en la Eurocámara) por las duras restricciones de cultivo y pesca que suponía.
Las recientes declaraciones de la jefa de la burocracia europea durante su visita a España han resultado llamativas teniendo en cuenta la independencia política que la Comisión Europea ha de respetar. La progresiva politización de la Comisión Europea es un tema en boga desde hace décadas en el mundo académico. Un análisis de cerca de 9.000 discursos de miembros de la Comisión pronunciados entre 1999 y 2019 elaborado por el Journal of Common Market Studies destaca la paulatina transición de la Comisión «del lado tecnocrático de su configuración híbrida hacia el político». Las elecciones al Parlamento Europeo de 2024 representan una oportunidad para dar a la institución competencias políticas bajo el pretexto de democratizarla; así lo afirmó la propia Comisión durante la Conferencia sobre el futuro de Europa.
Von der Leyen aspira a la reelección
En esta línea, el Spitzenkandidaten, un sistema que aspira a que el cabeza de la lista más votada al Parlamento sea elegido como presidente de la Comisión, busca legitimar electoralmente a la Comisión y con ello convertirla en un poder ejecutivo similar al de un Estado; una estrategia federalista que varias familias europeas han respaldado con la excusa de avanzar en favor de la construcción de una federación europea; entre ellos el Bloque de Izquierda, grupo en el que se encuentra Izquierda Unida, que ya ha anunciado que propondrá un candidato para 2024. A pesar de ello, este sistema ha suscitado algunas dudas sobre su idoneidad entre cargos oficiales. La propia vicepresidente de la Comisión, Margarethe Vestager, cuestionó el sistema afirmando que los candidatos podrían concurrir a las elecciones únicamente con la intención de ser renovados en su cargo.
Por el momento, Von der Leyen ha recibido ya el respaldo de algunos políticos para su reelección como presidenta en 2024; Pedro Sánchez trasladó su apoyo a la líder europea hace tan sólo unos días. Depende de los jefes de Estado y de gobierno presentes en el Consejo Europeo —entre ellos el próximo presidente del Gobierno tras el 23J— que vuelva a ser nominada al cargo.
Son varios los escenarios posibles para 2024, año en el que tendrán lugar los próximos comicios europeos; las previsiones electorales apuntan a un aumento de la representación del Grupo de los Conservadores y Reformistas Europeos en la eurocámara, lo que haría necesario contar con su apoyo para ser elegido presidente de la Comisión. Manfred Weber, presidente del Partido Popular Europeo, ha afirmado estar dispuesto a colaborar con el grupo. Lo que plantea la cuestión de si se enfrentará a Von der Leyen en la carrera por la presidencia de la institución europea. Por su parte, la actual presidente, que ha criticado abiertamente a los «extremismos políticos», podría aspirar a recabar los apoyos que la faltan entre los grupos del centro, entre ellos Renew, grupo del presidente Emmanuel Macron. Así lo apunta el medio EURACTIVE, que señala las recientes declaraciones de la presidenta durante su visita a España —en las que se autodenomina parte del centro democrático— como un posible indicador que confirma esta teoría.
