La guerrilla terrorista del Ejército de Liberación Nacional (ELN) ha reivindicado la «legitimidad» del atentado en Arauca que dejó tres militares muertos debido a la connivencia que existe entre las autoridades castrenses y los grupos paramilitares.
«Nuestras acciones contra este plan paramilitar es legítimo, somos una organización con principios políticos, como guerrilla insurgente con más de 60 años de lucha, combate y resistencia», ha defendido el ELN en un comunicado.
En el texto, el ELN ha acusado a las fuerzas militares que fueron objeto del ataque de haber estado «custodiando y protegiendo» a la banda de alias ‘Pescao’, quien ha sido utilizado por el Ejército para su «plan mercenario».
El ELN también ha destacado su papel durante los fallidos diálogos con la delegación del Gobierno de Colombia a la que reprocha haber permitido su jefe negociador, Otty Patiño, «proseguir con su tarea progringa» de mantener al país «amarrado a los planes de guerra perpetua».
En agosto finalizó un alto el fuego bilateral que se prolongó durante un año, si ambos denunciaron violaciones del mismo, y desde hace varios meses más el proceso de negociación ha estado paralizado, después de que el ELN se resistiera a seguir dialogando hasta que el Gobierno no les retirase de su lista de grupos armados.