Y en esta ocasión una buena noticia. De las monjas y del cardenal prefecto de la Congregación para los Religiosos.
Como estamos en un mundo de locos, y la Iglesia habita en él, había en Francia una congregación de fundación reciente que abundaba en vocaciones. Por los motivos que fueren, que los desconozco, la división anidó en el instituto y un grupo numeroso del mismo tomó la puerta y se fue. Eran en su gran mayoría jóvenes y al parecer de intachable vida.
Dos obispos españoles, el de San Sebastián y el de Córdoba, acogieron a las disidentes. Y supongo que además felices por no seguir cerrando conventos sino por abrirlos y con un número notable de religiosas. Pero poco dura la alegría en casa del pobre. De Roma vino una durísima medida expulsando a las escindidas de la vida religiosa. El prefecto Braz de Avís y el Papa Benedicto XVI en sus últimos días.
Ni que decir tiene que los obispos de San Sebastián y de Córdoba fueron debidamente vapuleados por los medios de siempre por haber acogido a esas «rebeldes» a las que la Iglesia había repudiado sin contemplaciones.
Pues parece que Braz de Avís, que se hizo presente en el convento de Vergara, les ha permitido continuar la vida religiosa. O el menos eso refiere Infocatólica:
http://infocatolica.com/?t=noticia&cod=21162
¿Se dieron cuenta de la injusticia de la medida inicial? ¿Quiere Braz de Avís, no quemado sino achicharrado por los Franciscanos y las Franciscanas de la Inmaculada presentar una cara más amable pues la que tenía hasta el momento estaba ya tumefacta de las bofetadas recibidas? Vayan ustedes a saber. Pero si eso se confirma hasta pudiera ser que la vida religiosa femenina no desapareciera de España y las pocas congregaciones vivas, de aquí o de fuera, puedan volver a abrir por lo menos algunos de los conventos que se están cerrando. Porque hoy la vida religiosa femenina se parece a una granja familiar regida por dementes que cuidan a las gallinas que no ponen huevos y sacrifican a las ponedoras.
Veremos en qué queda todo pero la noticia, si se confirma, es muy alentadora. Y a ver si la misericordina la distribuyen con más generosidad. Aunque también es posible, a mí hasta los dedos ya se me antojan huéspedes, que no haya nada firme y todo quede en agua de borrajas. Con lo que el hoy en el Blog cardenal Braz de Avís volvería a su apodo habitual. Que monseñor Munilla celebrara una misa ante esas ex/yanoex religiosas da visos de verosimilitud a la reconciliación. Y leo que a esa misa asistieron cien o más religiosas o lo que sean de ese ya de nuevo instituto, exinstituto o vayan ustedes a saber lo que son. Me parece un número notabilísimo. ¿Será Vergara una nueva Aguilera? Dios lo quiera.