El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha vuelto a apostar por una «solución democrática, pacífica y negociada a la crisis de Venezuela«, un país que ha alcanzado «un punto crítico», y ha advertido de que España no descarta «la adopción de medidas adicionales si pueden ser efectivas».
Rajoy ha hecho estas declaraciones durante su intervención en el Palacio de la Moncloa para hacer balance del curso político, en la que ha pedido al Gobierno de Nicolás Maduro que «reconsidere la situación» ante la convocatoria de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) de este domingo en el país latinoamericano.
«Seguiremos de cerca, junto a los socios europeos, el desarrollo de la situación, sin descartar la adopción de medidas adicionales si pueden ser efectivas», ha avisado el presidente del Gobierno, sin especificar cuáles serían las mismas.
Rajoy ha señalado que España defiende «una solución democrática, pacífica y negociada» para la situación que atraviesa Venezuela y que debe pasar «por el fin de la violencia y el respeto al derecho de manifestación pacífica, el respeto por la separación de poderes, la legitimidad de la Asamblea Nacional elegida democráticamente y la independencia de la fiscalía general».
También pasa, ha continuado, «por la plena liberación de más de 400 presos políticos, la adopción de medidas humanitarias urgentes, hacer llegar ayuda a la población más necesitada y la celebración de elecciones libres, democráticas y transparentes, respetuosas del principio de igualdad de voto y sufragio universal, que devuelvan la palabra al pueblo venezolano».
Se ha referido a la convocatoria este domingo de la Asamblea Nacional Constituyente, «rechazada por la mayoría de la población», y que se ha hecho sin consenso previo y «sin respetar los criterios democráticos esenciales».
El Gobierno español, al igual que el resto de estados miembros de la UE, los países de la región y organizaciones internacionales y regionales, «piden al Gobierno venezolano que reconsidere la situación», ha reclamado Mariano Rajoy.
Ha destacado que España ha estado siempre y estará «a la vanguardia de la defensa de la democracia y los derechos humanos en Venezuela» y que lo ha demostrado con su apoyo a «un diálogo urgente, sincero y efectivo».
España, ha apuntado, también ha liderado en el seno de la UE una «respuesta firme ante el deterioro progresivo de la situación» en Venezuela, donde viven 600.000 europeos, entre ellos 200.000 españoles.
Alguna publicidad valiente y la ayuda desinteresada de muchos lectores como tú han hecho posible esta noticia. Conoces nuestra línea editorial, a contracorriente de la ideología dominante y desacomplejadamente comprometida con la dignidad humana, la unidad de España y la identidad de Europa. No es fácil ni es barato sostener un medio de comunicación que beba de estos postulados, siempre contra los más poderosos. Por eso te pedimos que nos ayudes con una aportación, que formes parte de nuestro proyecto, que ayudes a que sigamos incordiando al Poder. Puedes hacerlo de varias maneras, infórmate aquí.
Leer más…
La policía chavista detiene a 40 personas al día por protestar contra Maduro
Maduro, contra el mundo