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Este artículo se publicó en La Gaceta antes de convertirse en La Gaceta de la Iberosfera, no siendo entonces propiedad de Fundación Disenso.
Socio-Director de Eurogroup Human Resources.Orgulloso de colaborar con Intereconomía desde abril de 2012."""
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Las mayorías absolutas en España degeneran en absolutismo

18 de mayo de 2015

Los objetivos de la casta política & asociados y los intereses de los españoles no coinciden. Esta regla general apenas tiene excepciones y cada vez un mayor número de ciudadanos es consciente de ello.

Porque nuestro sistema político-económico parasitario, clientelar, comisionista, subvencionado, desigual y, en definitiva, corrupto está antidemocráticamente diseñado para generar políticas beneficiosas para el entorno de la casta y, paralelamente, perjudiciales para los españoles.

Y en este sentido, podemos llegar a la conclusión relativa a que la supuesta “ingobernabilidad e inestabilidad” de España, a la que temen determinados pseudo líderes bipartidistas y que podría consumarse tras las elecciones (después de los posibles pactos post electorales entre partidos), podría ser sumamente beneficiosa para los ciudadanos.

En virtud de lo anterior, hay que tener en cuenta que a cualquier país democrático, dotado de separación de poderes y, por tanto, gobernado por una clase política sometida a la ley, no le conviene tener un gobierno formado por pactos de poder entre varias formaciones políticas. Puesto que la mejor fórmula de gestión gubernamental para una democracia consolidada es la mayoría absoluta del partido más votado.

Pero por el contrario y en el caso de España, cuya Administración Pública esta podrida debido al parasitismo de nuestra corrupta  partitocracia, es más ventajoso que los gobiernos tanto en clave nacional como a nivel autonómico y local se determinen en función de pactos entre partidos.   

Y la prueba más evidente de todo ello la tenemos en Andalucía, una autonomía actualmente ingobernable debido a la imposibilidad de formar un gobierno estable. Pero que en función de esta ingobernabilidad se está poniendo en jaque (al menos de modo temporal) la continuidad de un régimen político-económico basado en la corrupción institucionalizada, y que ha arruinado a los andaluces y, a la vez, enriquecido a la casta político-sindical regional y a sus redes clientelares.

¿Qué significa “estabilidad o gobernabilidad”, es decir, mayoría absoluta, en el idioma bipartidista?

¿Privilegios, aforamientos, enchufismos y enriquecimiento masivo para la casta política? ¿Subvenciones para los partidos, los sindicatos y la patronal? ¿“Capitalismo de amiguetes”, vía conexión corrupta entre la economía y la partitocracia? ¿Politización de la Justicia para tapar en la medida de lo posible la corrupción política? ¿Políticas favorables a los oligopolios y los dos grandes lobbies del IBEX-35?

El presidente Rajoy, más conocido como el clon de ZP, ha solicitado a los votantes tradicionales del PP (a los mismos que ha traicionado y arruinado) el “voto útil” al objeto que su partido obtenga mayoría absoluta, tanto en las elecciones autonómicas y municipales como en las nacionales, y de esta manera poder formar un futuro gobierno estable y dotar a España de la necesaria gobernabilidad.

¿Para el Sr. Rajoy, mayoría absoluta es sinónimo de subir abusivamente los impuestos, recortar prestaciones públicas a los ciudadanos, hundir a las pymes y a los autónomos, empobrecer a la clase media, etc., mientras se salva a las antiguas cajas de ahorros saqueadas por los políticos?

¿Mayoría absoluta significa para el Sr. Rajoy endeudar a España y a las futuras generaciones de españoles,  mientras se financia, vía deuda pública e impuestos confiscatorios, la corrupción y el despilfarro de la casta en las  deficitarias y ruinosas comunidades autónomas?   

¿Necesita el Sr. Rajoy otra mayoría absoluta para continuar y, por tanto, bendecir definitivamente las políticas antisociales (y en contra de la familia), pro etarras y a favor de la independencia de Caraluña del socialista Zapatero?

Antes de votar en las próximas elecciones, a modo de reflexión, y en virtud del desastroso bagaje de los gobiernos que han mal gestionado España con mayoría absoluta, los españoles deberíamos hacernos la siguiente pregunta:

¿Es más difícil robar la cartera a los ciudadanos disponiendo de una cómoda mayoría absoluta o teniendo que establecer acuerdos entre varios partidos políticos?

Esperemos, por el bien de los españoles y para desgracia de la casta, que no puedan conformarse mayorías absolutas en España hasta que no se regenere nuestro corrupto sistema político-económico.  

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