«Ser es defenderse», Ramiro de Maeztu
La Gaceta de la Iberosfera
Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
Bilbao, 1965. Periodista, máster de 'El País'. Noticias y opiniones que escandalicen a los incondicionales de lo políticamente correcto y la «memoria histórica». En la editorial Homo Legens ha publicado 'Eternamente Franco' y 'Los césares del imperio americano'. Su último libro es 'Eso no estaba en mi libro de historia del Imperio español' (Almuzara).
Bilbao, 1965. Periodista, máster de 'El País'. Noticias y opiniones que escandalicen a los incondicionales de lo políticamente correcto y la «memoria histórica». En la editorial Homo Legens ha publicado 'Eternamente Franco' y 'Los césares del imperio americano'. Su último libro es 'Eso no estaba en mi libro de historia del Imperio español' (Almuzara).

Prodigio peronista: inflación sin economía

2 de noviembre de 2020

¿Cuántas veces al día escucha la expresión “Vamos camino de Venezuela”? Muchas, ¿verdad? Tantas que dentro de poco se lo dirá un vecino que de pronto hablará con ese acento dulce de los culebrones.

Pues lamento disentir. Vamos todavía más lejos que a Venezuela, mucho más al sur: a Argentina. ¡Lo que ha sido ese país y lo que es ahora! Bueno, lo mismo le ha ocurrido a Venezuela, que en 1950 tenía la quinta mayor renta per cápita del mundo y ahora, después de veinte años del ‘socialismo del siglo XXI’, la población que todavía vive en el país revuelve las basuras para encontrar comida. En vísperas de la Segunda Guerra Mundial, el PIB per cápita argentino superaba a los de Austria y Finlandia, doblaba al italiano y triplicaba al japonés. 

En Argentina se ha superado el 40% de población en el nivel de pobreza, aunque el porcentaje puede ser mayor, pues, como en España con los socialistas, se ha cambiado la metodología de las estadísticas oficiales

España está mal y va a ir a peor, sobre todo debido al Gobierno que tenemos y a sus votantes, a los que no parece alterarles la ruina en que nos están metiendo los políticos que ellos han elegido. En esa competición de fracasos, los argentinos nos ganan. El Gobierno de los Fernández, el presidente Alberto Fernández y la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, ordenó el confinamiento del país el 20 de marzo… y acaba de ampliarlo hasta el 25 de octubre. Más de 200 días de encierro, a pesar de los cuales el número de muertos diarios oscila entre 400 y 600.

Los efectos en la economía son los que ya conocemos. Cese de la actividad, empobrecimiento, desplome del PIB, despidos, cierre de empresas… En Argentina se ha superado el 40% de población en el nivel de pobreza, aunque el porcentaje puede ser mayor, pues, como en España con los socialistas, se ha cambiado la metodología de las estadísticas oficiales. La caída del PIB en el segundo semestre ha sido del 19%. La terrible experiencia de Europa y de Estados Unidos no ha persuadido a los gobernantes de Iberoamérica a ser más originales y hasta atrevidos que los nuestros. 

Sin embargo, los peronistas son campeones, pues han realizado algo sorprendente. Con una economía parada, la inflación sigue por las nubes. En 2019, el país del Plata fue el quinto más inflacionario del mundo (ranking en el que reina Venezuela con cerca del 10.000% anual), con un 50%. En septiembre, la inflación fue del 36,6% interanual; y la acumulada desde enero quedó en el 22,3%.

Cuando baje este ‘exceso de liquidez’ […] sobrevivirán las naciones donde se haya invertido en educación y en industria y donde se respeten las leyes y la propiedad privada

¿Cómo es posible que los precios sigan subiendo cuando no hay comercio ni transporte, la gente no puede salir a la calle ni ir de viaje…? Entre los motivos: el ansia de la sociedad argentina con hacerse con ese salvavidas que es el dólar de EEUU al precio que sea y el derroche peronista en subsidios y bolsas de comida para tener contentas y controladas a las crecientes masas de pobres, su recurso para controlar las calles y ganar las elecciones.

Con la Reserva Federal de EEUU y el Banco Central Europeo emitiendo papel sin fin, la catarata de pesos argentinos no llama tanto la atención y siempre encontrará fondos de inversión dispuestos a comprar deuda pública de Buenos Aires. Pero toca plantearse la pregunta que nos hacemos en Europa: ¿hasta cuándo? Porque incluso las máquinas pueden romperse por agotamiento de los materiales. Y cuando baje este ‘exceso de liquidez’ (como se llama pudorosamente al océano de deuda) sobrevivirán las naciones donde se haya invertido en educación y en industria y donde se respeten las leyes y la propiedad privada. Ni Argentina ni España parece que quieran estar en ese grupo.

.
Fondo newsletter