Ni hubo independencia ni la habrá. Todo era mentira. Un vulgar teatrillo con vistas a una reforma constitucional que el Gobierno de Mariano Rajoy.
Cobarde proviene del francés couard. El origen se remonta al francés medieval coart y esta vendría de coue (cola), del latín, que significa cola y hace alusión al momento en que los perros esconden la suya entre las piernas por miedo. La declaración de Carme Forcadell en el Tribunal Supremo rompió el discurso separatista y la presidenta del Parlamento catalán, antier firme defensora del proceso secesionista, aseguró que la declaración de independencia fue un acto simbólico con el único objetivo de sortear la entrada en prisión.
Forcadell evitó la prisión incondicional traicionando la vía unilateral
No lo logró, ¿o quizás sí? Forcadell ha pasado la noche en Alcalá Meco, pero previsiblemente este viernes abandonará la cárcel para pasar el fin de semana en su casa mientras miles de catalanes sufren los efectos de un proceso suicida hacia ningún lugar. Los políticos nacionalistas han utilizado a los ciudadanos, incluido a los niños, para colmar sus ansias de protagonismo pero, cuando tocaba poner la otra mejilla, han demostrado su cobardía. Una república, sí, pero de cobardes.
Ni hubo independencia ni la habrá. Todo era mentira. Un vulgar teatrillo con vistas a una reforma constitucional que el Gobierno de Mariano Rajoy parece dispuesto a conceder. Las declaraciones del ministro de Exteriores, Alfonso Dastis, abriendo la puerta a legislar más concesiones a los nacionalistas así lo atestiguan. Una más, otra más, de un Ejecutivo que ha sido incapaz de afrontar la crisis territorial y de aplicar el 155 con garantías.
Interior respalda la inacción de los Mossos durante la huelga en Cataluña
Cataluña está fuera de control. La huelga del pasado miércoles evidenció las simpatías de los Mossos por los radicales que cortaron todas las vías de acceso a Barcelona. Toda España vio las sonrojantes imágenes de los agentes sentados conversando con los antisistema y permitiendo que miles de ciudadanos no pudieran acudir a sus puestos de trabajo. Interior, sin embargo, respaldó la inacción de la Policía catalana y Juan Ignacio Zoido aseguró que su labor había sido «proporcionada» a la situación vivida.
Oriente, roto
Las derrotas del ISIS en Siria e Irak han terminado con una parte del autoproclamado califato. Pero lo más peligroso, su ideología, está más presente que nunca en todo el mundo. Arabia Saudí, que comparte ideología con la organización terrorista, se encuentra sumida en una grave crisis interna y las ansias de poder del heredero, el príncipe Mohammed bin Salman, han creado el caldo de cultivo ideal para un nuevo conflicto con Irán de fondo.
El 'golpe blanco' en Arabia Saudí, una excusa para confiscaciones millonarias
¿Cómo afecta todo esto a Siria e Irak? Las relaciones entre Irán y Arabia Saudí no pasan por un buen momento y la situación de inestabilidad en Riad podría desencadenar un conflicto que, sin duda, tendría como escenario los citados países. El propio Al Assad afirmó esta semana que el aumento de las hostilidades hacia Teherán estaba relacionado con el declive de las organizaciones terroristas en la zona. Por el momento, las autoridades saudíes han pedido a sus ciudadanos que abandonen Líbano.
La dictadura islámica mantiene otro frente abierto en Yemen, donde la ONU ha exigido a la coalición árabe que permita la entrada de la ayuda humanitaria que permanece paralizada tras el cierre de puertos y aeropuertos. Riad, que lucha contra los rebeldes hutíes en Yemen desde 2015, anunció el lunes el cierre temporal de todos los puertos aéreos, marítimos y terrestres yemeníes, sin indicar durante cuánto tiempo se mantendrá la medida.
Más de 400.000 niños corren el riesgo de morir de inanición y la epidemia de cólera ha sufrido un repunte en los últimos meses. La ONU lamenta la actuación, pero mantiene a Arabia Saudí en el Consejo de Derechos Humanos. Incluso en el mes de mayo premió al régimen wahabita, un país donde las mujeres apenas cuentan con autonomía, con la creación de un equipo para proteger los derechos de estas. Cosas veredes, amigo Sancho.