El presidente de VOX, Santiago Abascal, ha liderado la cumbre de los patriotas y conservadores europeos celebrada en Madrid, un encuentro para debatir el futuro de la Unión y aunar fuerzas frente a la deriva globalista y apátrida de las élites de Bruselas que alientan la inmigración masiva y no respetan las soberanía de las naciones.
En su discurso inicial, Abascal ha trasmitido el honor que es para VOX liderar este encuentro, que ha contado con la presencia del primer ministro húngaro, Viktor Orbán, del primer ministro de Polonia, Mateusz Morawiecki, y de la candidata a la presidencia de Francia, Marine Le Pen, entre otros dirigentes europeos, y ha hecho referencia a la «extraña alianza» entre «la izquierda más radical, por un lado, y los grandes poderes económicos por otro», al tiempo que ha denunciado «los evidentes los efectos perniciosos sobre las economías nacionales que ha provocado el globalismo». «Y por eso tenemos que marcar un nuevo camino para nuestros compatriotas (…), que ya están demandando ese nuevo rumbo».
En este sentido, el líder de VOX ha afirmado que el globalismo amenaza la prosperidad de las naciones europeas y que los acuerdos de libre comercio «han acabado con el principio de preferencia comunitaria y han condenado a numerosas regiones a la pobreza y a la despoblación». Debemos de, ha subrayado, «hacer frente a la competencia desleal» que sufre el sector primario. «Nuestro principal deber es defender a los nuestros, defender a nuestros productores».
Así, Abascal ha señalado que las economías de las naciones europeas están amenazadas por «las suicidas normativas medioambientales decretadas por los burócratas de Bruselas a espaldas de nuestros pueblos» y ha abogado por alcanzar compromisos en materia de reindustrialización. «No puede ser que otras potencias sigan beneficiándose )…), mientras lideran las estadísticas de contaminación». Y ha instado a los líderes europeos a alcanzar un compromiso para lograr en Europa «una energía barata, sostenible y eficiente» -incluyendo la nuclear-, con el objetivo de que las naciones europeas sigan siendo dueñas de su destino.
Abascal también ha reclamado un acuerdo en materia de natalidad y ha expresado la «emoción» que su formación siente al ver las políticas de apoyo a la maternidad que llevan a cabo los gobiernos de Orbán en Hungría y Morawiecki en Polonia. «Ellos nos están marcando el camino», ha declarado, antes de pedir que no se ahorre ningún tipo de medio en la batalla contra el suicidio demográfico de Europa. «Está en juego nuestra supervivencia como civilización (…), es hoy nuestro principal deber moral», ha zanjado.
Ya en su discurso final, con el que ha concluido la Cumbre de Madrid, cita que se ha saldado con un «rotundo éxito», según palabras del jefe de la delegación de VOX en el Parlamento Europeo, Jorge Buxadé, el líder del partido ha reiterado que más allá de la declaración conjunta el hecho de mostrarse juntos y unidos era en sí «un mensaje político importantísimo».
«Somos nosotros los que defendemos Europa y defender Europa es decir que no permitiremos que se alce la bandera de la hoz y el martillo, ni la de la media luna, ni la bandera oscura y apátrida de las élites globalistas (…), hoy hemos demostrado que (…) tenemos valores y objetivos comunes y también el deber de crear instrumentos comunes. Debemos trabajar con prisa y sin pausa».