Al menos cinco personas fueron decapitadas y varias fueron secuestradas en ataques perpetrados contra dos localidades situadas en la provincia mozambiqueña de Cabo Delgado (norte), según han informado los medios del país africano, en medio del repunte de la inseguridad en esta zona.
Según las informaciones recogidas por el portal independiente de noticias Mediafax, los asaltantes decapitaron a cinco personas en la localidad de Pangane, donde también secuestraron a un número indeterminado de personas.
Supervivientes del ataque que huyeron hacia la localidad de Macomia han relatado a su llegada que las decapitaciones fueron llevadas a cabo como ejecuciones públicas, a la vista de otros residentes. Las autoridades no se han pronunciado por ahora sobre lo sucedido.
Asimismo, cuatro personas fueron secuestradas en un segundo ataque contra la ciudad de Chai, mientras que dos supuestos milicianos fueron capturados y entregados a la Policía después de que sus actividades en la zona generaran sospechas, tal y como ha recogido la agencia mozambiqueña de noticias AIM.
La provincia de Cabo Delgado es escenario desde octubre de 2017 de ataques obra de milicianos islamistas conocidos como Al Shabaab, sin relación con el grupo homónimo que opera en Somalia y que mantiene lazos con Al Qaeda. Desde mediados de 2019 han sido reivindicados en su mayoría por Estado Islámico en África Central (ISCA), que ha recrudecido sus acciones desde marzo de 2020.
Entre sus últimos ataques figura el ejecutado el 24 de marzo contra la ciudad de Palma, que desencadenó unos enfrentamientos que se extendieron hasta principios de abril y provocaron decenas de miles de desplazados. La cifra final de víctimas sigue siendo una incógnita, mientras que el Gobierno mozambiqueño se ha limitado a hablar de «decenas» de muertos.