La inmigración ilegal en Canarias continúa siendo un grave problema que no solo atenta contra la integridad territorial del archipiélago canario, sino que también está propiciando un alto nivel de saturación en los servicios de emergencias en algunas de sus islas. Saturación que llega hasta tal punto en el que, en ciertas ocasiones, los servicios destinados a la atención y seguridad ciudadana son interrumpidos en su labor contra la actual presión migratoria que, mientras es silenciada por la mayor parte de los medios de comunicación, ha dejado ya a más de 3.200 inmigrantes ilegales en lo que llevamos de año.
“Desde la crisis de los cayucos no he conocido nada igual”, afirma un agente de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado (FCSE) en mitad de una semana en la que más de 1.200 ilegales han accedido ilegalmente a las Islas Canarias. El testimonio de Fernando, director de un humilde digital comarcal, es muy parecido: asegura que las ambulancias tardan menos en llegar al puerto que al centro de la ciudad ante una situación de emergencia. Hechos que evidencian el nivel de colapso que está ocasionando el actual Gobierno con su indolente actitud ante una presión migratoria que va en aumento.
Si bien el fin de semana del 14 al 16 dejó a más de 800 ilegales en tan solo tres días, la última semana del mes de enero no comenzó mucho mejor: la media diaria de inmigrantes ilegales llegados a las islas ha sido de más de 180, según las diligencias de las FCSE consultadas por La Gaceta de la Iberosfera.
Por días, el lunes 24 accedieron a España más de 170 inmigrantes ilegales repartidos entre las islas de Gran Canaria (64), Lanzarote (80) y La Graciosa, donde llegaron por sus propios medios un total de 32 magrebíes que, según testimonios de los propios ilegales, habían partido de las costas de Safi (Marruecos).
El día de menor presión migratoria sobre el archipiélago fue el martes. Durante la madrugada, una embarcación con 39 ilegales a bordo llegó a la Playa del Inglés, en la localidad de San Bartolomé de Tirajana de la isla de Gran Canaria. Más tarde y ya durante la mañana, la embarcación Guardamar Concepción Arenal de Salvamento Marítimo interceptó a un total de 61 inmigrantes ilegales al sur de la isla, que fueron trasladados con posterioridad al muelle de Arguineguín.
El miércoles dejó una intensa jornada. Entrada la madrugada, los servicios de emergencia recibieron un aviso que les puso sobre la pista de varias embarcaciones que habían partido desde las costas de Tarfaya (Marruecos). Tras ser desplazado hasta la zona el buque Guardamar Caliope de los operativos de Salvamento Marítimo, un total de cinco embarcaciones fueron asistidas, en las que viajaban 199 inmigrantes ilegales que, con posterioridad, fueron llevados a la isla de Lanzarote. Por otro lado, se recibió un aviso de la existencia de una embarcación al sur de Gran Canaria en la que viajaban un total de 120 inmigrantes ilegales, la más numerosa desde verano del 2021. El día finalizó con 45 magrebíes interceptados por la Guardia Civil en aguas de Lanzarote y 32 ilegales localizados por Salvamento Marítimo al sur de Gran Canaria. En total 396 inmigrantes entraron ilegalmente en Canarias en tan solo 24 horas.
Entre el jueves y el domingo, 596 inmigrantes ilegales completaron una semana en la que más de 1.200 han llegado en tan solo 7 días, a una media diaria de más de 180 al día en la que la peor parte se la han llevado las islas de Lanzarote y Gran Canaria. En total, más de 3.200 inmigrantes ilegales solo en este mes de enero, que ya suponen un incremento de la inmigración en las Islas Canarias de un 56 por ciento si comparamos las cifras actuales con el balance del Ministerio del Interior de principios 2020.
En resumen, estamos ante el peor mes de enero de la historia en Canarias, cifras que nos recuerdan a la nefasta crisis de los cayucos que dejó a más de 30.000 inmigrantes ilegales en el archipiélago canario durante el año 2006. La diferencia reside en que, en aquel año, no fue hasta los meses de febrero y marzo cuando se alcanzaron cifras similares a las de este 2022.
