El Grupo de Conservadores y Reformistas Europeos (ECR) ha constituido el ECR-Eurolat, un grupo político que tiene el fin de encontrar una coordinación frente al comunismo que avanza en la Iberosfera.
Estas son las cuatro principales claves de este grupo de trabajo que nace para la defensa de la libertad y del Estado de Derecho en la región:
El liderazgo de VOX
La iniciativa ha nacido bajo el liderazgo de Hermann Tertsch, eurodiputado de VOX, miembro de la comisión de Asuntos Exteriores (AFET) y vicepresidente del ECR, que goza de la confianza de todo el grupo para liderar los temas relacionados con Iberoamérica.
Por primera vez en el ECR será España, a través de los cuatro eurodiputados de VOX, quien lidere esta relación. Su impulso ha logrado que en el propio ECR haya surgido un mayor interés y una vocación por llevar la batalla cultural anticomunista a un continente que comparte historia, valores y dimensiones espirituales y culturales con los conservadores europeos.
El ECR-Eurolat es un nuevo paso del partido liderado por Santiago Abascal en su acción exterior en defensa de la libertad emprendida con la constitución de la Fundación Disenso, que auspició el pasado mes de octubre la ‘Carta de Madrid’. España, afirma VOX, tiene ahora la responsabilidad de liderar la reacción europea ante la amenaza de un proyecto criminal que lamina derechos y libertades.
El fin de las políticas de apaciguamiento de la UE con las narcodictaduras
El objetivo de este grupo de trabajo es poner fin a la política de apaciguamiento de las estructuras mayoritarias de la Unión Europea hacia las dictaduras de inspiración comunista de Venezuela, Cuba y Nicaragua, una inercia constante que ha ocasionado un grave desgaste para la credibilidad y la integridad de la política europea en Iberoamérica por la condescendencia ante el totalitarismo y los planes de desestabilización en la región del Foro Sao Paulo y el Grupo de Puebla.
El Foro, nacido en 1990 por decisión del tirano Fidel Castro y del expresidente de Brasil, Lula da Silva, y con la presencia de organizaciones dedicadas al narcotráfico y al terrorismo como las FARC, y el Grupo de Puebla, al que pertenecen el presidente argentino, Alberto Fernández, el expresidente español José Luis Rodríguez Zapatero, y la actual ministra española Irene Montero, entre otros, se infiltran en los centros de poder para imponer su agenda ideológica.
Hoy una parte de la región está secuestrada por regímenes izquierdistas denunciados por crímenes de lesa humanidad, basados en la tortura, la represión y la subversión, además de la ruina, y apoyados por el narcotráfico, terceros países y partidos que conforman gobiernos en Europa como Podemos, cuyos dirigentes, con amplias relaciones con el narcocomunismo, forman parte del Consejo de Ministros.
Un proyecto europeo en el que podrán participar todos los partidos miembros del ECR
El proyecto, el que serán vicepresidentes Carlo Fidanza, de Fratelli d’Italia, Anna Fotyga, de Ley y Justicia (Polonia) y Derk Jan Eppink, de Foro para la Democracia (Países Bajos), compromete a partidos y a dirigentes que representan a millones de europeos a luchar por la libertad en Iberoamérica y el refuerzo de las relaciones trasatlánticas con las fuerzas democráticas en el continente.
Todos los partidos miembros del ECR que lo deseen podrán participar en las cumbres, que se celebrarán cada seis meses una vez en el continente iberoamericano y otra en Europa. En ellas tendrán presencia también los representantes de las fuerzas conservadoras y nacionales iberoamericanas que se sumen a la iniciativa.
Una esperanza para los defensores de la libertad en Iberoamérica, hoy abandonados
La misión se ha constituido para la creación de una fuerte alianza entre partidos y la sociedad civil contra el totalitarismo izquierdista. Va a establecer una autopista de información, debate y contenidos políticos entre fuerzas conservadoras de Europa y los acosados partidos conservadores y democráticos de los países de Iberoamérica. Y supone una esperanza para los millones de defensores de la libertad abandonados y traicionados en Iberoamérica.
A ambos lados del Atlántico, señala el ECR-Eurolat, existen los mismos enemigos, el socialismo y el comunismo, que allí son ampliamente financiados por el narcotráfico con lo que su amenaza adquiere una categoría especial. Ante su infinito potencial corruptor, es imprescindible la generación de fuertes sinergias, añade. Entre los objetivos también está la eficaz fiscalización y seguimiento de las políticas que lleva a cabo la Unión Europea en el continente americano y proponer correcciones e iniciativas nuevas.
