«Ser es defenderse», Ramiro de Maeztu
Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
SEÑALA EL 'elevado grado de incertidumbre'

Varapalo del Banco de España al Gobierno: empeora la previsión de crecimiento de 2021

El Banco de España ha rebajado sus estimaciones de crecimiento del PIB para este año como consecuencia de los rebrotes del covid-19 y las nuevas medidas restrictivas adoptadas desde enero y por el retraso de los fondos europeos, y ahora estima un crecimiento del 6% en 2021 en el escenario central, ocho décimas menos que en diciembre, pero ha mejorado más de un punto la previsión para 2022 (+5,3%) y ha mantenido la de 2023 (+1,7%).

En sus nuevas proyecciones macroeconómicas 2021-2023, que no contemplan el nuevo paquete de ayudas de 11.000 millones, el Banco de España contempla este escenario central, pero dependiendo de que haya nuevos brotes, del ritmo de vacunación o de la secuelas más o menos intensas en el tejido productivo y el empleo establece dos escenarios alternativos más: uno suave y otro severo, en los que el crecimiento del PIB para este año se situaría en el 7,5% y el 3,2%, respectivamente.

El director general de Economía y Estadística del Banco de España, Óscar Arce, indicó que los meses de enero y febrero han sido peores de lo previsto en diciembre y aunque ha apuntado que en marzo se está viendo un «incipiente» repunte de la actividad, este menor crecimiento en el primer trimestre, junto con la menor ejecución prevista de los fondos de la UE, están detrás de la rebaja de ocho décimas del crecimiento previsto para este año.

En concreto, sobre la evolución del PIB del primer trimestre, el Banco de España afirma que el crecimiento entre enero y marzo caerá un 0,4% en el escenario central, mientras que oscilará entre una leve expansión del 0,4% en el escenario suave y una contracción del 0,9% en el escenario severo.

En cuanto a los fondos europeos, en diciembre el Banco de España estimaba que se ejecutaría el 70% de la inversión prevista por los fondos presupuestados, pero ahora rebaja esta estimación hasta el 55%, por el retraso en el ritmo de desembolso. Esta ejecución de 15 puntos menos se traslada, en cambio, al año 2022, de ahí el mayor crecimiento previsto para ese ejercicio.

En términos de PIB, esta menor ejecución de la inversión restará tres décimas al crecimiento este año, que se trasladan, en cambio, a un mayor crecimiento el próximo. Para Arce, este retraso no tiene por qué ser negativo si esta demora sirve para invertir el dinero en proyectos más productivos.

La autoridad monetaria afirma que las perspectivas económicas siguen sujetas a un «elevado grado de incertidumbre», vinculada tanto, en el corto plazo, a la evolución de la pandemia y la velocidad del proceso de inmunización de la población como, a medio plazo, a las consecuencias económicas de la crisis.

TEMAS |
Fondo newsletter