Hungría defendió este miércoles la política de los países bálticos adoptada en referencia a la frontera con Bielorrusia y la invasión migratoria, y cuestionó si Bruselas «está en el mismo planeta» por cuestionar las vallas que países como Polonia han anunciado que levantarán.
«Las organizaciones internacionales están comenzando a perder la cordura sobre la inmigración por completo», aseveró el ministro de Relaciones Exteriores de Hungría, Peter Szijjarto, de visita en Estonia, donde abogó por «un discurso claro para fortalecer la importancia del control fronterizo a cada país que está bajo presión».
En este sentido, Szijjarto insistió en que hay dos amenazas a la seguridad de Europa Central, que son la presión migratoria y la «posición cada vez más peligrosa e irracional« de la ONU y la UE.
En referencia a Bruselas, arremetió contra los Veintisiete para criticar que «quieren admitir en la Unión Europea a personas que están atacando a los guardias fronterizos polacos y que de ninguna manera están dispuestos a aceptar nuestras reglas de conducta, nuestras leyes, que se están comportando agresivamente con nosotros», según informa el diario ‘Magyar Hírlap’.
«Europa Central debe saber que si no se defiende ella misma, nadie más la defenderá«, concluyó el jefe de la diplomacia húngara.
Polonia, Letonia y Lituania, puerta de entrada a la UE para inmigrantes , han denunciado en los últimos meses que la presión sobre sus fronteras ha aumentado, con miles de cruces ilegales registrados en lo que va de año. La mayoría de inmigrantes ilegales proceden de Afganistán, Libia, Siria y otros países africanos.
El líder bielorruso, por su parte, ha alertado de que Mink no tiene «dinero ni fuerza» para contener el flujo migratorio, por lo que dejará que los migrantes avancen hacia otros países de la zona.
