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Utiliza una explosión retórica de tintes nazis

Macron declara ‘no ciudadanos’ a los franceses no vacunados: ‘Tengo ganas de fastidiarles’

El presidente de Francia, Emmanuel Macron. Europa Press

El presidente de la República Francesa, Emmanuel Macron, ha sorprendido al mundo declarando su intención de «enmerder» (digamos, «fastidiar», por ser corteses) a los no vacunados, a quienes ha definido como «no ciudadanos», lo que, imaginamos, les deja al margen de los Derechos del Ciudadano que fue tras la Revolución el código en el que se inspiraron todas las cartas de derechos humanos posteriores.

Con las presidenciales a un tiro de piedra y con un Éric Zemmour que empieza a atraer incluso a los que odian su ideología, el presidente ha hecho un pan con unas tortas con esa explosión retórica de tintes nazis (sustituir «non vaccinés» por «Untermenschen»), alejando a quienes leen correctamente en sus palabras una peligrosa deriva hacia la deshumanización de una parte significativa de la población francesa.

Al final, el tiro le ha salido por la culata, y la encendida polémica que han provocado sus palabras ha llevado, por segunda vez, a retrasar otras 24 horas el tratamiento en la Asamblea de la ley sobre el ‘pase verde’. «No soy partidario de ‘fastidiar’ a los franceses”, dijo en la entrevista a Le Parisien que se ha hecho más que viral… «Pero en este caso, a los no vacunados, tengo muchas ganas de ‘fastidiarles’. Y es lo que seguiremos haciendo, hasta el final. Esa es la estrategia».

La expresión exacta ‘enmerder’, más cercana a ‘joder’ para ser precisos, con toda su carga de vulgaridad soez, ya la había usado en su día su predecesor Georges Pompidou, quien pidió a la burocracia que dejara de «joder a los franceses».

Pero la consecuencia inmediata del exabrupto ha sido generar tal polémica que la Asamblea Nacional, reunida para aprobar el pasaporte de vacunación, tuvo que suspenderse pasada la medianoche y dejar la votación para otro día, como había sucedido en la sesión anterior.

Para el ‘candidato por sorpresa’ de la campaña presidencial, Éric Zemmour, las declaraciones totalitarias de Macron han sido una bendición que ha acogida con su característica celeridad verbal. «De ser presidente, dejaré de joder a los franceses», escribió en seguida desde su cuenta de Twitter. 

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