El número de parados registrados en las oficinas de los servicios públicos de empleo (antiguo Inem) subió en 44.436 desempleados en febrero (+1,1%), su mayor alza en este mes desde el año 2013, cuando se incrementó en 59.444 personas, según datos publicados este martes por el Ministerio de Trabajo.
Con este aumento del paro, el quinto consecutivo, el volumen total de parados alcanzó al finalizar el segundo mes del año la cifra de 4.008.789 desempleados. No se superaban los cuatro millones de parados desde abril de 2016, unos datos que desmontan el triunfalismo del Gobierno socialcomunista tras anunciar el presidente, Pedro Sánchez, un nuevo plan para de 11.000 millones para empresas del turismo y restauración, aunque el jueves la vicepresidenta tercera de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, se mostró incapaz de concretar detalles. «Estamos viendo qué medidas serían necesarias para actuar con eficacia», señaló.
El dato de paro de febrero no incluye a los trabajadores que se encuentran en suspensión de empleo o reducción horaria como consecuencia de un ERTE, expediente de regulación temporal de empleo (aproximadamente 900.000), ya que la definición de paro registrado no los contabiliza como desempleados.
En términos desestacionalizados, el paro registrado subió en febrero en 20.222 personas, mientras que en el último año el desempleo acumula un aumento de 762.742 personas, lo que supone un 23,5% más.
El paro aumentó en febrero en todos los sectores económicos menos en la construcción, donde bajó en 5.116 personas (-1,6%). El mayor aumento lo registraron los servicios, los más afectados por las restricciones, con 36.877 desempleados más (+1,3%).
Sin ayudas directas
Los datos han llegado después de que el PSOE, Unidas Podemos y el PNV rechazaran en el Pleno del Congreso la propuesta de VOX para que se subvencione, y se otorguen ayudas directas y exoneraciones de impuestos a empresas afectadas por las restricciones para compensar costes fijos y aminoraciones en su facturación por la pandemia.
Las ayudas directas a la hostelería debería ir destinadas a mantener el 70% de la facturación en comparación con años anteriores a la pandemia, según destacó el socio directo de abogados Cremades & Calvo Sotelo, Diego Solana, durante una rueda de prensa convocada por la plataforma ‘La Hostelería de Todos’.
El despacho Cremades & Calvo Sotelo, que representa a la plataforma, ofrece a sus asociados la opción de reclamar las pérdidas económicas sufridas desde la declaración del Estado de Alarma, busca con su propuesta acortar lo máximo posible los plazos, «haciendo valer el derecho que tienen los empresarios hosteleros de recibir indemnizaciones por las pérdidas sufridas».