La Generalitat de Cataluña ha propuesto este viernes a los partidos que las elecciones autonómicas se pospongan hasta el 30 de mayo.
Esta ha sido la última propuesta que ha lanzado el vicepresidente de la Generalitat, Pere Aragonès, en la reunión de la mesa de partidos para decidir si se mantienen o aplazan los comicios del 14 de febrero, aunque todavía no hay acuerdo.
La propuesta cuenta con la oposición de VOX, cuyo presidente, Santiago Abascal, ha manifestado que «se pueden realizar con medidas de seguridad» y ha rechazado a «quienes quieren que los catalanes vivan en la excepcionalidad». En este sentido, ha anunciado que estudian un posible recurso al aplazamiento: «si hay un resquicio legal, lo haremos«.
Por su parte, el candidato de VOX Ignacio Garriga ha lamentado que el aplazamiento se produzca por «motivos políticos». «Tienen miedo porque el conjunto de los catalanes está clamando por depositar sus votos para recuperar Cataluña», ha afirmado.
Asimismo, ha celebrado el candidato que la Junta Electoral haya estimado la denuncia de VOX contra la Generalitat después de que animara al acoso al partido a través de las redes sociales.