La mitad de los españoles (50%) no tiene previsto comprar una vivienda ni a medio ni a largo plazo, un porcentaje que aumenta respecto al 47% que tenía esa intención en agosto de 2022, según se muestra en el estudio Radiografía del mercado de la vivienda en 2023 de Fotocasa. Del informe se desprende también que un 21% de los españoles, que no ha comprado ni ha intentando comprar vivienda este año, tiene la intención de adquirir una de aquí a los próximos cinco años.
La directora de Estudios y portavoz de Fotocasa, María Matos, ha explicado que la intención de compra se mantiene estable, ya que, en comparación con el anterior semestre, sólo hay una variación de un punto porcentual, y ha explicado que donde se produce ese descenso es en el corto plazo, por lo que se relaciona directamente con el nuevo escenario de altos tipos de interés y con la esperanza de que se estabilicen en niveles atractivos en los próximos años.
Si se desglosa este dato de intención de compra, el resultado es que, de ese 21% que tiene previsto comprar, un 7% planea hacerlo en los próximos dos años, un punto porcentual más que seis meses antes, y un 14% en un plazo que oscila entre los dos y cinco años, el mismo porcentaje en comparación a seis meses antes.
Por segmentos de edad, un 38% de los jóvenes entre 18 y 24 años se plantean adquirir una vivienda en los próximos cinco años, seis puntos porcentuales más que la registrada medio año antes. Sin embargo, la proporción es la opuesta entre los particulares que oscilan entre los 25 y los 34 años, ya que sólo un 38% tiene intención de comprar a cinco años vista, cuando en la anterior muestra el porcentaje era de un 43%. La intención cae conforme aumenta la edad y, para el último tramo, entre los mayores de 55 y 75 años, la intención se fija en un 11%.
El precio de las hipotecas
Entre las razones de por qué se pospone la compra de vivienda, el principal argumento que se da es la carencia del suficiente dinero ahorrado para ello (31%), porque su situación económica o laboral no se lo permite (29%), porque tienen otras prioridades o gastos (23%) o porque los precios actuales son muy elevados (22%).
Gana protagonismo la cuestión hipotecaria, un argumento que influye en la decisión de posponer la compra de un 25% de particulares con intención de adquirir vivienda en los próximos cinco años.