Me parece muy difícil dar dos noticias tan carcajeantes de modo solemne y funcionarial, más aún agruparlas con un cintillo común que no destaque la humorada y la chapuza en ambas, pero El País lo consigue.
La primera es ‘El PSOE ofreció a Carmena la candidatura a la alcaldía de Madrid’, y uno solo puede imaginar la cara de Antonio Miguel Carmona, a quien en las últimas elecciones municipales el PP le ofreció esa misma alcaldía.
Para los madrileños, en cambio, es clarificador saber que el PSOE de Pedro Sánchez solo se diferencia de Podemos en que son menos torpes usando Telegram.
Porque de eso va la segunda noticia, que El País redacta así: ‘Bescansa propone un acuerdo con Errejón para sustituir a Iglesias’, que es un modo como otro cualquiera de cargarse el chiste. Porque lo divertido del caso es que Bescansa envió este proyecto de Idus de Marzo en un grupo de Telegram que tiene esta gente, y lo hizo en abierto.
Y, claro, César se mosqueó, que menudo es. Va hoy la cosa de caras, porque también me ha dado por imaginar la cara de terror de la diputada podemita al advertir su error, equivalente a llamar a tu novia por el nombre que no es.
Y con tantas posibilidades cómicas como dan estas dos informaciones si uno las une bajo un mismo epígrafe, a El País no se le ocurre otro que este: ‘Movimientos en la izquierda ante las próximas elecciones’.
Abajo, otro movimiento de una izquierda muy real a la que El País no llamará izquierda ni por chiste en su primera: ‘Cuba formaliza el relevo oficial de Castro por Miguel Díaz-Canel’. Después, estoy seguro, de unas reñidas elecciones.
Están los dos en la foto que abre El Mundo, el uno ancianísimo, el otro algo menos, ambos muy enchaquetados, que el verde oliva ya no se lleva: ‘El castrismo cambia de cara’. Uno ve a esos dos funcionarios, sobre todo al que se despide, tan mayor, después de haber convertido al país más próspero de Latinoamérica en una cárcel de miseria, y no puede evitar pensar en esos ‘movimientos en la izquierda’ española; en esa frívola adscripción radical de tanto joven occidental que vive como no se ha vivido en la historia y que aboga por ese triste engaño.
Abre El Mundo con otro cuplé de moda: ‘Montoro se reafirma tras ser emplazado por Llarena’. El juez dice que el ‘procés’ se financió con dinero público; el ministro, que algo debe de saber de esto, que no, y que no sabe de dónde salió el dinero. Y es raro, porque la Agencia Tributaria sabe hasta cuando estornudamos.
Encabezando la columna de la derecha, ‘Iglesias cree que Errejón y Bescansa tramaban un plan para apartarlo’. Yo también lo ‘creo’, y media España conmigo.
ABC abre con foto de archivo de los dos protagonistas, Iglesias y Errejón, y el titular ‘Guerra civil en Podemos’. Iglesias, por cierto, lo ha llamado ‘golpe de Estado’, pero eso es porque Pablo ya se ve dirigiéndose a los españoles en su versión de ‘Aló, presidente’. A ver, Pablo: de Estado, lo que se dice de Estado… Como no sea de estado civil..
En La Razón sacan a Errejón con la cara de darse cuenta de que ha puesto todo mal en el examen del que acaba de salir. O de pensar en cómo ha podido ser tan torpe Carolina, que menudo lío en que nos ha metido la gallega. Debajo de la foto: ‘La penultima traición de Errejón’. Y es que La Razón, suponemos, aún espera la definitiva.
Y, abriendo, lo otro: ‘Carmena dijo que no iba a repetir cuando el PSOE intentó ficharla’.
