La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha concedido un total de 9.228.281,84 euros al sindicato UGT desde el año 2020 —escasos meses después de llegar a la presidencia de la región—. Este dato refleja que los continuos rifirrafes entre estas organizaciones afines a la izquierda y la miembro del Partido Popular no afectan lo más mínimo en la cantidad anual que recaudan. De hecho, LA GACETA ya reveló hace una semana que la cantidad entregada a CCOO desde el ejecutivo regional ascendía a los 9.785.149,56 euros. Es decir, que, en total, el PP de Madrid ha subvencionado con 19.013.431,40 a los sindicatos más vinculados al PSOE del panorama nacional.
En lo que llevamos de 2024, la comunidad le ha entregado dos subvenciones sin contraprestación valoradas en más de 1,8 millones. Los dos motivos que han argumentado han sido la prevención de riesgos laborales y un plan presentado por la organización para la negociación colectiva y el diálogo social en el ámbito de las administraciones públicas.
En total, han sido 13 las licitaciones a las que ha accedido el sindicato. La primera, el 1 de julio de 2020 —casi un año después de la investidura de Ayuso—. La partida fue de 1.305.600,00 euros y, como la gran mayoría de las licitaciones a las que han accedido, alegaron que se invertirían en acciones para prevenir los riesgos laborales.
Por su parte, el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha concedido un total de ocho contratos a UGT que se acercan al millón de euros. La suma es de 647.756,00 euros desde su llegada en junio de 2019.
Muy distintos son los datos basándonos en las CCAA en las que VOX estuvo cogobernando junto al PP, ya que en las cinco regiones en las que asumieron competencias ejecutaron recortes drásticos que llevaron a estas organizaciones a manifestarse y ejecutar importantes reducciones de plantilla. Eso sí, siempre estaban el PP (en regiones como Andalucía y Madrid) y el PSOE (a nivel nacional y en comunidades autónomas como Castilla La-Mancha) para salvarles otorgando partidas millonarias.
De hecho, sólo en 2023 el sindicato dirigido por Pepe Álvarez se embolsó 37.763.081,15 euros en subvenciones. Unas partidas económicas que a cualquiera hacen entender su justificación de acciones políticas como la del cupo catalán, basado en la insolidaridad y que perjudicará al resto de españoles. Es más, ayer lunes, solicitó públicamente que se volviesen a subir los impuestos a los españoles para que no se notase la marcha de Cataluña del régimen común, un plan que pocos obreros (a quienes dicen defender) apoyarían dada la situación económica del país.