El detenido por matar con un machete a un sacristán en el exterior de la iglesia de Nuestra Señora de La Palma de Algeciras (Cádiz) y herir a varias personas es un marroquí de 25 años, en situación ilegal y que estaba pendiente de expulsión, según han informado fuentes de la lucha antiterrorista.
La Policía Nacional le detuvo en la ciudad gaditana en junio de 2022 y comprobó que carecía de la documentación necesaria para poder residir en territorio español, por lo que automáticamente se iniciaron los trámites para su expulsión, según ha publicado este jueves el diario El Confidencial. Sin embargo, el proceso se alargó y el asesino nunca llegó a ser devuelto a suelo marroquí.
Según este medio, el terrorista no llegó a pasar por un Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE), donde habitualmente son trasladados después de ser detenidos a la espera de ser entregados a las autoridades de Rabat.
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, viajará este jueves a Algeciras (Cádiz) tras suspender su agenda en Estocolmo, donde estaba previsto que se reuniera con sus homólogos de la Unión Europea, según han informado fuentes de Interior.
La Audiencia Nacional ha abierto una investigación por delitos de terrorismo, que ha recaído en el Juzgado Central de Instrucción Número 6, que es el que estaba de guardia.
Los hechos se produjeron poco antes de las 20.00 horas, cuando este hombre entró en la iglesia de San Isidro de Algeciras armado con un machete, y atacó al cura, dejándolo gravemente herido.
Posteriormente, accedió a otra iglesia, la de Nuestra Señora de La Palma en la que, tras causar diversos destrozos, atacó al sacristán. El sacristán logró salir de la iglesia, pero fue alcanzado por el atacante en el exterior, donde le causó heridas mortales.
Instantes después, el individuo fue neutralizado y detenido, siendo llevado a dependencias de la Policía Nacional.