El dictador nicaragüense Daniel Ortega cumplió el miércoles a 17 años seguidos en el poder, tras asumir el Ejecutivo del país en 2007, luego de ganar unas elecciones.
Ortega, quien ya gobernó Nicaragua durante la década de los ochenta ha convertido la jefatura de la nación en un asunto estrictamente familiar, destinando a su mujer, Rosario Murillo, la vicepresidencia durante los últimos siete años.
Desde que en 2018 la oposición se manifestara masivamente en las calles, Ortega optó por recrudecer su represión contra todo aquel que disienta de sus políticas, acumulando decenas de presos políticos en los calabozos del régimen.
A finales de año la dictadura sandinista protagonizó una nueva escalada en contra de integrantes de la Iglesia Católica, que se ha convertido en uno de los últimos reductos de oposición en la nación centroamericana. Al cierre de 2023 Ortega apresó a cerca de una veintena de clérigos.