«Ser es defenderse», Ramiro de Maeztu
La Gaceta de la Iberosfera
Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
PODRÍA ELIMINAR UNOS 100.000 PUESTOS DE TRABAJO

Petro celebra el avance de su reforma sanitaria en el Congreso

El presidente de Colombia, Gustavo Petro. Europa Press

Mientras el presidente de Colombia, Gustavo Petro, celebra que la Cámara de Representantes aprobó la reforma a la salud en el primer debate, la oposición colombiana, líderes gremiales y representantes del sector médico alertan sobre los riesgos de la propuesta legislativa.

Petro se vanaglorió de su primera victoria a través de un mensaje en Twitter: «Arduo trabajo, profundo el debate. Mucho más profundo que cuando se aprobó la ley 100», escribió: «Felicito el trabajo de los y las congresistas», agregó.

Las votaciones del proyecto fueron 14 votos a favor y 6 en contra. Entre quienes se opusieron están Felipe Corzo y Andrés Forero, del Centro Democrático; Jairo Cristo y Betsy Pérez, de Cambio Radial; Alexander Quevedo y Gerardo Yepes del Partido Conservador. El proyecto ahora será discutido en la plenaria de la Cámara de Representantes, luego en la Comisión Séptima del Senado, y finalmente en la plenaria del Senado.

La reforma de Petro busca quitar la función de administración de los recursos a las entidades privadas para dársela al Estado; un texto que ha generado discordia, incluso entre miembros del gabinete.

Forero, del Centro Democrático, fue una de las voces más activas del debate y cuestionó que «esta reforma acaba con el sistema de aseguramiento en salud y sienta las bases para un costoso e ineficiente monopolio estatal».

«Hemos sido derrotados en la comisión, pero el debate sigue y no nos damos por vencidos; vamos a seguir defendiendo la salud de los colombianos, en este caso en la plenaria», afirmó.

De ese mismo partido, la legisladora María Fernanda Cabal respondió a Gustavo Petro y escribió también en Twitter: «Celebrando la destrucción de uno de los mejores sistemas de salud del mundo. ¡Nos opondremos!».

Y es que varias organizaciones médicas y de pacientes, así como de instituciones prestadoras de servicios, dieron a conocer fuertes críticas y preocupaciones y anunciaron que de aprobarse la reforma emprenderán una demanda por presunta «injerencia política y clientelismo».

Gremios como la Asociación Colombiana de Empresa de Medicina Integral (Acemi) denuncian que la reforma podría eliminar 100.000 puestos de trabajo por el hecho de que se acaben las EPS en Colombia y pierdan autonomía.

Por su parte la Organización Pacientes Colombia ya ha afirmado que acudirá ante la Corte Constitucional para demandar la reforma del presidente Petro en caso de que sea aprobada.

«Esto es una reforma de $80 billones, de una línea ideológica del presidente Gustavo Petro que cree que estamos en los tiempos de Adán y Eva, y que antes de que él llegara no había ni salud ni institucionalidad», dijo al respecto, Denis Silva, el vocero de Pacientes Colombia.

Transparencia por Colombia advierte presunta injerencia política

Además de las organizaciones anteriormente mencionadas, otras como Transparencia por Colombia también levantaron la voz y advirtieron que artículos de la reforma podrían generar clientelismo y presunta injerencia política.

La organización señala el «riesgo de opacidad de información» en el presupuesto que contempla la reforma a la salud, lo cual podría sumarse a los 67 casos de corrupción registrados entre 2016 y 2020, en el sector salud, y que habrían generado pérdidas millonarias del erario.

Asimismo, el director de Transparencia por Colombia insistió en que dentro del Ministerio de Salud también se deben crear «medidas de prevención de riesgo de injerencia política y corrupción» para que, en artículos como el 43, que ahora será debatido en plenaria en el Congreso, no termine con anomalías de clientelismo.

.
Fondo newsletter