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BUSCAN MINAR LA INSTITUCIONALIDAD

La izquierda utiliza un presunto crimen pasional para deslegitimar a la Policía de Ecuador

Policía de Ecuador
Policía de Ecuador. Europa Press

Ecuador se ha visto sacudido por una noticia que pone en duda la institucionalidad del país sudamericano. La abogada María Belén Bernal ingresó a la Escuela Superior de Policía (ESP) para visitar a su marido, un agente de la Policía, y no hay registro de su salida, así como tampoco hay rastro de su esposo.

Ante la incapacidad de la propia Policía de responder por la ubicación de ambos, el Presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, removió de sus funciones al director de la Escuela Superior de Policía Francisco Zumárraga. Además, anunció la sanción de todos los responsables.

“Todos quienes se encuentren involucrados en este repudiable hecho serán sancionados conforme a la Ley. Nadie quedará impune. Mantendremos informados de las acciones emprendidas a sus familiares, especialmente a su madre.”, afirmó.

https://twitter.com/LassoGuillermo/status/1570865772490260483?s=20&t=FP0Jv25gvmk3m5XfAtOBlA

El esposo: principal sospechoso

Hasta el momento el esposo de Bernal es el principal sospechoso de urdir esta trama. Sin embargo, esto no fue siempre así. El teniente de Policía Germán Cáceres fue el primero en anunciar la desaparición de su esposa María Belén, avisándole a su madre. Luego denunció la desaparición ante a la Fiscalía General del Estado, el 13 de septiembre de 2022.

En la declaración de Cáceres establece que salió con su esposa de la Escuela Superior de Policía y la dejó en otra ubicación dentro de la ciudad de Quito. Desde allí ella se habría tomado un taxi. Esa fue la última vez que la vio, según el testimonio.

Desde ese momento la Fiscalía solicitó que la Policía siga y vigile a Cáceres. Pero sus colegas perdieron el rastro de su compañero. Dado que no tenía orden de captura, la Policía señala que Cáceres se dio a la fuga. Aunque la orden de captura en su contra aún no ha sido emitida, el ministro de interior, Patricio Carrillo, se refirió recientemente a Cáceres como prófugo de la justicia.

 ‘¡Por Dios! Policía, devuélvanme a María Belén Bernal

Adicionalmente el ministro Carrillo ordenó la suspensión de todas las actividades en la Escuela Superior de Policía durante la investigación. Hasta ahora se encontró una sandalia y una cartera de Bernal en las instalaciones. La madre de Bernal agregó que además encontraron botellas de cerveza en el sitio.  “¡Por Dios! Policía, devuélvanme a María Belén Bernal”, exclama su madre, Elizabeth Otavalo.

En vista que Cáceres no se ha presentado tres días seguidos a trabajar tiene una causal de cese, según el Código de Entidades de Seguridad (Coescop). De allí que ya fue dado de baja de la Policía.

Golpe a la institucionalidad

Todo sucede en medio de lo que el ministro Carrillo ha llamado un ataque a la institucionalidad de la Policía. Hace apenas días la justicia ecuatoriana condenó a un policía por abatir a dos ladrones en flagrancia. Tres delincuentes asaltaron a un menor con cuchillo. Santiago Olmedo, uniformado, respondió con fuego y ahora podría costarle su libertad por hasta 13 años. Carrillo denuncia que la condena de Olmedo emite un mensaje: “Inmovilizar y paralizar a la Policía”.

Por medio del activismo judicial, la izquierda nacional y regional ha procurado imponer un relato donde el policía es opresor y los criminales son víctimas de la sociedad. Lo cual ha quitado fuerza a la Policía y vulnerado a la población.

El propio Carrillo ha estado bajo ataque. Por medio de redes sociales anunció que tenía un viaje programado por el matrimonio de su hija y eso le ha valido cuestionamientos a través de las mismas. Es de notar que el funcionario de Gobierno no ha descuidado sus funciones.

Dado que es la Fiscalía quien debe comandar las investigaciones, la fiscal general, Diana Salazar, reprochó el hecho que la Policía tenga en curso una búsqueda individual. “Cuidado y vayan a manipular cualquier indicio”, reclamó Salazar. “Los agentes del orden tienen como obligación estatal encontrar a las personas, no desaparecerlas. Y menos aún en un regimiento absolutamente controlado por estos agentes del Estado”, aseguró la fiscal.

Riesgo de que la Policía pierda legitimidad

Ahora que Ecuador vive la peor ola de violencia en su historia, perder la legitimidad de la Policía resultaría desequilibrante. En caso de tener un rol en el encubrimiento, sería un duro golpe a la institucionalidad en el país.

Desde el sector feminista han intentado ideologizar la desaparición de Bernal. Pero lo que han logrado es exponer cómo la criminalidad afecta a toda la nación, sin distinción de sexo. Tal es así que los varones entre 18 y 25 años son las principales víctimas de homicidios en Ecuador.

Por su parte el Gobierno de Lasso ha ratificado su compromiso para encontrar a Bernal y a Cáceres, e incluso ha dispuesto una recompensa para quien brinde información de su paradero. No obstante, la indignación ciudadana crece, acorde aumenta la violencia en el país y cuestiona la capacidad del Gobierno para afrontarlo. Hace días el Ejecutivo desplegó a las Fuerzas Armadas como refuerzo para combatir al narcotráfico en las zonas más peligrosas del país.

En total hay alrededor de 100 que personas serían sancionadas dentro del cuerpo policial. Incluso una cadete ha sido detenida por presuntas investigaciones. Lo cual ha abierto aún más las especulaciones sobre la posibilidad de un tema de corte pasional en el caso.

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