Los transportistas han convocado para mañana marchas lentas en protesta al desvío obligatorio de la N-340 a la autopista AP-7 y de la N-240 a la AP-2 y calculan que participarán unos 150 camiones.
En declaraciones a Efe, el responsable de Laboral de la Federación empresarial de Auto-Transporte (FEAT), Xavier Torres, ha denunciado que los desvíos obligatorios desde el pasado 2 de septiembre comportan «sobrecostes de entre 300 y 600 euros mensuales» a las empresas.
«Los desvíos nos obligan a circular en sentido contrario al del destino para coger la autopista en muchos casos, lo que suponen rodeos de 20 kilómetros, más otros 20 de vuelta más los peajes», explica.
Los peajes están bonificados al 50 %, pero al ser obligatorios la FEAT los califica de «impuesto encubierto» y reclama la gratuidad o una bonificación más alta, como la que aplica La Rioja (75 % con el diferencial completado por el gobierno autonómico).
Entre 150 y 170 afiliados se han interesado por las protestas de mañana, según Torres, aunque «es difícil de prever (la asistencia) porque algunos que estarán en ruta pueden decidir sumarse».
