Muy pocas veces el PSOE y el PP se han puesto de acuerdo sobre el modelo de EspaƱa. En contadas ocasiones han sido capaces de supeditar sus intereses partidistas al bien nacional y asĆ nos va. El Pacto constitucional pudo ser una de ellas aunque, con el necesario afĆ”n de que estuvieran todos, dejó demasiadas puertas abiertas a ruptura de la unidad de EspaƱa. Pronto se vio que no todos querĆan lo mismo y, si bien unos buscaban una EspaƱa en la que cupieran todos, otros buscaban una EspaƱa de la que pudieran prescindir. Tras el 23 de febrero PP y PSOE alcanzan el primer, y hasta ahora Ćŗnico, intento serio de frenar al independentismo con la LOAPA. Fue el TC el que echó al traste la eficacia de esta Ley, aunque quedó claro que, cuando ambos se conjuran, el separatismo se queda sin alas.
DespuĆ©s de este intento, el PP y el PSOE, con tal de superar al contrario, han aceptado el acuerdo con el separatismo siempre que les ha convenido, jugando sin duda con EspaƱa no como un bien a guardar sino como una mercancĆa a poner en almoneda. No se puede pedir al separatismo que se tome mĆ”s en serio la unidad espaƱola de lo que se la toman los grandes partidos nacionales. Parece que ahora PP y PSOE estĆ”n de acuerdo en marcar lĆneas rojas con la nueva Ley de Seguridad Nacional que estĆ” en plena tramitación parlamentaria.
No entiendo nada. A falta de pedagogĆa y estrategia para integrar a todos en un proyecto de EspaƱa, Āæno serĆ” del todo necesario que PP y PSOE dejen claro que no venden nuestra unidad por su primacĆa partidaria? ĀæAlguien me lo explica?Ā