La Casa Blanca, a través de la secretaria de prensa, Jen Psaki, ha respaldado las protestas «pacíficas» que se están produciendo en las casas de los jueces conservadores de la Corte Suprema de Estados Unidos a raíz de la publicación del borrador que podría revocar la sentencia Roe v. Wade, que abrió la puerta al aborto como un derecho constitucional.
El pasado sábado, se produjeron protestas fuera de las casas de los jueces Roberts y Kavanaugh el lunes ante la casa del juez Alito. El martes, durante la rueda de prensa diaria en la Casa Blanca, se le preguntó a Psaki si el presidente Biden pensaba que las protestas frente a los domicilios de los miembros de alto tribunal, citando el ejemplo del juez Alito ―autor del borrador―, eran una forma de intimidación.
La secretaria de prensa señaló que la opinión del presidente Biden «desde hace mucho tiempo» ha sido que «la violencia, las amenazas y la intimidación» de cualquier tipo «no tienen cabida en el discurso político». «Y creemos, por supuesto, en las protestas pacíficas«, añadió, según recoge Breitbart.
Psaki señaló que es «interesante» que haya «voces de la derecha» que «han denunciado estas protestas» mientras permanecieron «en silencio» con las que se produjeron «frente a las casas de los miembros de la junta escolar», «el secretario de Estado de Michigan», las «amenazas» hechas a mujeres «que buscan atención de salud reproductiva», o con la «insurrección contra nuestro capitolio».
La secretaria de prensa de la Casa Blanca aseguró que las protestas «han sido pacíficas hasta la fecha», y «ciertamente continuamos alentando eso fuera de las casas de los jueces«, añadiendo que «esa es la posición del presidente«.
Lo cierto es que el Código de EEUU, en la sección 1.507 del título 18, establece que las protestas delante del domicilio de un juez es un delito federal. Dice literalmente:
«Cualquiera que, con la intención de interferir, obstruir o impedir la administración de justicia, o con la intención de influir en cualquier juez, miembro del jurado, testigo o funcionario judicial, en el desempeño de su deber, piquetes o marchas en o cerca de un edificio que albergue a un tribunal de los Estados Unidos, o en o cerca de un edificio o residencia ocupado o utilizado por dicho juez, miembro del jurado, testigo o funcionario del tribunal, o con tal intención utiliza cualquier camión de sonido o dispositivo similar o recurre a cualquier otra manifestación en o cerca de tal edificio o residencia, será multado bajo este título o encarcelado por no más de un año, o ambos«.
Psaki on «protests that have been peaceful to date»:
— Townhall.com (@townhallcom) May 10, 2022
«We certainly continue to encourage that outside of judges’ homes.» pic.twitter.com/h3t8Jsw1Ss
No deja de ser sorprendente que, la Casa Blanca, aliente a los ciudadanos estadounidenses a cometer delitos federales, intimidando a los jueces más importantes del país, y tratando de influir en una decisión que han de tomar como máximos representantes del poder judicial en Estados Unidos.
