Para Bosco Matamoros, analista político y exdiplomático nicaragüense, la situación en el país sigue en deterioro y tiende a agudizarse ante una nueva propuesta de Ley de sanciones de Estados Unidos dirigida al régimen de Daniel Ortega si no cumple con un proceso electoral creíble. Al mismo tiempo, la oposición baila “el tango de las candidaturas” para participar en unos comicios hasta hora sin garantías.
Matamoros explicó que la propuesta de Ley “Renacer” del senador estadounidense Robert Menéndez está dirigida a promover elecciones libres y transparentes en Nicaragua, de lo contrario la crisis en el país se agudizaría.
“Si no se cumple un proceso electoral creíble van a sancionar a instituciones del estado nicaragüense, ahí mencionan inclusive al Ejército, la expulsión de Nicaragua del DR-Cafta [Tratado de Libre Comercio entre Estados Unidos, Centroamérica y República Dominicana], y el veto de Estados Unidos en los organismos multilaterales”.
“La situación de Nicaragua en vez de mejorar se ha deteriorado”, subrayó el analista político.
Tango de las candidaturas
Hasta ahora la oposición tiene siete candidatos presidenciales. El Viernes Santo se conoció la lista de diputaciones de la Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB) que aglutina a sandinistas que gobernaron con Ortega en la década de los 80, y grupos de izquierda en su mayoría. La lista incluye a activistas que en el 2016 llamaban a la abstención por la falta de garantías, como Violeta Granera y José Antonio Peraza.
La publicación del listado ha generado críticas debido a que no existen garantías constitucionales para ir a comicios. Ortega sigue ignorando la demanda de reformas electorales que permitan elecciones libres, transparentes y justas en la nación centroamericana.
“La oposición en Nicaragua en vez de estar planteando el pliego de sus propuestas se ha dedicado a bailar el tango de las candidaturas”, dijo Matamoros.
Mientras, el obispo de la Diócesis de Matagalpa se refirió a la lista de candidatos publicada el fin de semana durante la Misa del Domingo de Resurrección.
“Mientras el pueblo creyente, católicos y no católicos nos dedicábamos a reflexionar en los misterios de la pasión, muerte y resurrección del Señor algunos se dedicaban hacer listas y se imponen las preguntas: ¿listas para qué? ¿para presentárselas a quién? ¿para negociar con quién? ¿para posicionarse ante quién? ¿qué está pasando? ¿hay cosas detrás de bambalinas? ¿hay agendas ocultas? Hay que hablarle claro al pueblo nicaragüense”, dijo el prelado, quien ha sido un fuerte critico del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo, y ha demandado la necesidad de la unidad opositora.
“No perdemos la esperanza de que surjan líderes representativos de los intereses comunes y no la perdemos porque si Cristo ha resucitado, Nicaragua entera resucitará”, subrayó monseñor Álvarez, quien participó como mediador en el infructuoso diálogo nacional entre la dictadura y los representantes de la oposición en 2019.
Matamoros dijo que la comunidad internacional ha reiterado la demanda de reformas electorales a Ortega. “Parece que lo único que les interesa es el tema de los candidatos y las diputaciones porque ya se miran recibiendo un salario por cinco años haciendo nada o con quien va a ganar la presidencia”, acotó.
Con transparencia, Ortega pierde
El plazo para las reformas electorales vence el 31 de mayo. Para Matamoros, Ortega no ganaría unas elecciones libres y transparentes en Nicaragua.
“Ortega objetivamente no tiene la capacidad para ganar las elecciones de manera transparente, el único que le puede hacer ese regalo es la oposición, permitiendo un proceso viciado”, afirma el analista.
“Ese proceso no va a ser aceptado por la comunidad internacional y un gobierno no tiene la capacidad de sobrevivir sin el apoyo internacional, no hay suficientes inversiones internas y externas. Si nos sacan del DR-Cafta no habría ni zona franca, entonces tienes un Estado tribal, es decir que la tribu sandinista es la única que sobreviviría en el país”, aseveró Matamoros.
