El Gobierno izquierdista de México se ha mostrado «dispuesto y listo» para acoger de nuevo un proceso de “diálogo” entre el régimen venezolano y representantes de la oposición, afirmando estar deseosos de «contribuir a que sea todo un éxito».
El ministro de Exteriores mexicano, Marcelo Ebrard, ha considerado «muy positivo» la reanudación de los contactos entre la tirania de Nicolás Maduro y la Plataforma Unitaria de Venezuela, que aglutina a parte de la oposición venezolana.
Los negociadores de las dos partes, Jorge Rodríguez y Gerardo Blyde, han publicado en sus respectivas cuentas de Twitter un mensaje común en el que plantean «el rescate del espíritu de México», junto a una imagen en la que ambos aparecen estrechándose la mano.
El partido Vente Venezuela, de María Corina Machado, ha expresado su negativa a convalidar estas jornadas, insistiendo en la necesidad de nombrar una nueva dirección política de la oposición, que debe ser escogida por la gente y no por las cúpulas de las formaciones partidistas.
“La urgencia para recobrar la libertad implica la urgencia por articular la dirección opositora legítima, y eso no puede ser a través de más simulacros, falsas negociaciones o repartos entre partidos, sino con una elección en la que el voto de cada venezolano elija de verdad”, señaló la formación de Machado en un remitido público.
El chavismo y un sector de la oposición venezolana ya intentaron acercar posturas en 2021, pero el proceso concluyó tras la extracción a Estados Unidos de Alex Saab, testaferro de la tiranía de Maduro.