La Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol) ha descartado este jueves activar la alerta azul contra el exministro de Gobierno de Bolivia Arturo Murillo, huido del país hace unas semanas junto al anterior responsable de Defensa, Fernando López, mientras el nuevo gobierno socialista intenta culparlos por presuntas irregularidades en la compra de equipo y material antidisturbios.
«La respuesta es negativa, no aceptaron difundir la notificación azul para buscar al señor Murillo y López, entonces esta documentación ya es de conocimiento del fiscal, la notificación no se pudo cumplir», ha explicado el director de Interpol en Bolivia, Pablo García.
Durante una conversación para la emisora Radio Éxito, García ha explicado que la negativa de Interpol radica en que considera estos supuestos delitos de carácter «político».
La decisión de Interpol se produce después de que a finales de noviembre, el propio García asegurara que el organismo había dado el visto bueno a la activación del sello azul, que sirve para «recopilar información adicional sobre la identidad de una persona, ubicación o actividades en relación a un delito».
Murillo y López habrían salido del país el 5 de noviembre rumbo a Brasil, donde López seguiría, según la información que manejan las autoridades, mientras que Murillo, previo paso por Panamá, estaría ya en Estados Unidos.
Actualmente se sigue una investigación paralela al exministro de Hidrocarburos, Víctor Hugo Zamora. La policía boliviana decretó su búsqueda acusándolo de «tráfico de influencias y corrupción».