Un grupo izquierdista atacó el pasado sábado en París una procesión católica que partió de la plaza de la Roquette y debía llegar a la Iglesia de Notre-Dame.
La marcha estaba convocada por cinco parroquias de París y varias asociaciones diocesanas, y se organizó con motivo del 150 aniversario del martirio de católicos en la Comuna de París.
El obispo auxiliar de París, monseñor Denis Jachiet, comentó en una entrevista en Le Figaro que el propósito de la marcha «era puramente religioso«. «No había demanda política en nuestro planteamiento. Se reunieron familias enteras y ancianos».
Así, denunció que individuos vinculados a la extrema izquierda les insultaron desde el inicio de la marcha y confirmó que frente al cementerio de Père Lachaise la violencia se intensificó.
Boulevard de Menilmontant, pas de forces de l’ordre, pourtant très présentes un peu plus bas rue de la Roquette) pour s’interposer. Seul l’ordre de Malte assure la sécurité. pic.twitter.com/P85J2UnM7S
— Edouard Desforges (@desforgesvar) May 29, 2021
«Nos tiraron botes de basura, botellas, incluso vallas», dijo uno de los presentes en la marcha, al tiempo que declaró que les arrancaron las pancartas de las manos, les quitaron la bandera de Francia, que pisotearon, y finalmente les golpearon. Varios fieles resultaron heridos, entre ellos, un anciano que tuvo que ser hospitalizado por una brecha en la cabeza.
La Policía, que estaba supervisando la procesión, se vio obligada a intervenir utilizando gas lacrimógeno para dispersar a los agresores, y los feligreses se refugiaron en una iglesia cercana «para esperar y rezar», concluyó Denis Jachiet.