En contra de lo que está pasando en otras comunidades, en Asturias ni los hijos menores de 21 años se libran de pagar impuestos. La tendencia general en otras regiones es que aquellos hijos que hereden y sean menores de 21 años no tengan que pagar. En el Principado, en vez de bonificarles el impuesto de Sucesiones y Donaciones, se les aplica un tipo algo más reducido hasta 150.000 euros.
El Gobierno del Principado que encabeza el socialista Adrián Barbón no afloja la carga fiscal ni en el Impuesto de Sucesiones y Donaciones. Tampoco ha ajustado el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) a la inflación. Y todo ello, pese a que Asturias es una de las regiones donde las rentas medias-bajas pagan más.
Asturias no toca el impuesto de Sucesiones desde el año 2017 cuando elevó hasta 300.000 euros el mínimo exento para descendientes, ascendientes y cónyuges. El resto de comunidades ha ido reduciéndolo ostensiblemente, lo que aumenta la brecha. Utilizando la comparativa del Registro de Economistas y Asesores Fiscales, un hijo de 30 años que recibe de su padre 800.000 euros deberá pagar 103.135,48. Es la cifra más alta de toda España, y casi el doble de la segunda comunidad donde más se paga, que es Aragón, con 55.466,81 euros.
Volviendo a las Donaciones y a los menores de 21 años, el Principado modificó este año el impuesto para que se pague un tipo del 2% desde 10.000 euros de base liquidable a 150.000. A partir de ahí aumenta hasta llegar al tipo máximo del 36,5% que se aplica a las bases liquidables superiores a los 600.000 euros. Pero es que antes esta cifra se situaba en los 800.000, con lo que los contribuyentes asturianos, con la modificación del gobierno socialista de la región, ahora pagan más.
El Consejero de Hacienda del Principado, Guillermo Peláez, aseguró recientemente en sede parlamentaria que introducir alguna rebaja fiscal en el Principado para los herederos no está previsto. A pesar de que cada vez es más habitual que hereden hermanos, tíos y sobrinos por el creciente número de parejas sin hijos. En definitiva, en Asturias, además de los descendientes directos, también pagan elevados impuestos los descendientes colaterales. En el de Sucesiones no se benefician del mínimo exento de 300.000 euros que hay en herencias a descendientes, ascendientes y cónyuges.
