«Ser es defenderse», Ramiro de Maeztu
La Gaceta de la Iberosfera
Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
Este artículo se publicó en La Gaceta antes de convertirse en La Gaceta de la Iberosfera, no siendo entonces propiedad de Fundación Disenso.

Casado aparece con María San Gil y afirma tener dos mil compromisarios

Mientras la ex vicepresidenta insiste en la unificación de candidaturas, Pablo Casado apuesta por el debate -aunque no sea simultáneo- y cede a la integración… sólo después del Congreso.

 

A diez días del congreso del Partido Popular en el que se elegirá al sucesor de Mariano Rajoy, el candidato a la presidencia Pablo Casado se mantiene firme en su postura de rechazar una candidatura unitaria o de establecer cualquier pacto con su adversaria, Soraya Sáenz de Santamaría, y profetiza su victoria.

Ha echado, dice, sus cuentas y «van muy bien» con un apoyo estimado de alrededor de dos mil compromisarios, entre ellos cerca de la mitad de los que acudirán al congreso extraordinario desde Andalucía: «Tengo muy buenas vibraciones», ha dicho Casado en una entrevista en TVE, en la que ha señalado que la suma que están realizando desde su candidatura es «muy favorable» y que la mayoría ven con «buenos ojos» su proyecto, que «es importante para el partido y también para España».

La baza San Gil

«Yo hablaré de integración, pero solo cuando termine el proceso», ha advertido Casado, que ha insistido en que es evidente que «el aparato» del partido no está con él y ha señalado, además, que tras su candidatura no están ni José María Aznar ni Mariano Rajoy, que están manteniendo una neutralidad «impecable».

Casado, que ha protagonizado un acto por la libertad junto a Ángel Garrido, Lester Toledo, los padres de Leopoldo López y otros miembros de la comunidad venezolana en Madrid, ha contado este martes con un especialísimo apoyo. La ex presidenta del PP vasco, María San Gil, muy alejada del Partido Popular como otros compañeros de filas como Jaime Mayor Oreja o Carlos Iturgáiz, ha mostrado con su presencia en este acto su apoyo a la candidatura de Casado.

El debate… lejos

Respecto al debate público que ha propuesto con la otra candidata, Soraya Sáenz de Santamaría, ha subrayado que acatará lo que decida el comité organizador del congreso y que, según ha dicho, no parece que finalmente vaya a celebrarse. «No pasa nada», ha señalado, ya que entiende que al menos los medios de comunicación dejan la oportunidad de debatir, «aunque no simultáneamente».

Mientras, su adversaria parece inclinarse más por la ausencia de debate -ni simultáneo ni alterno- y sigue manteniendo su discurso por la integración: «Compañeros» y no «adversarios políticos», así define la ex vicepresidenta la relación que deberían mantener Casado y ella, que deben, a su juicio,  buscar «primero» los «puntos de coincidencia» para «trabajar por la unidad» del partido. Soraya insiste en una segunda fase que concluya en un «acto de integración». «Esto es un partido político que hace congreso para elegir presidente, somos compañeros de un mismo partido, y la unidad es un elemento muy querido y respetado por la militancia. Nos toca trabajar para la unidad. Yo respeto la posición de cada cual, pero para mí es lo prioritario».

 

TEMAS |
+ en
.
Fondo newsletter