«Ser es defenderse», Ramiro de Maeztu
Este artículo se publicó en La Gaceta antes de convertirse en La Gaceta de la Iberosfera, no siendo entonces propiedad de Fundación Disenso.

La ministra Calviño estaría ‘fuera del Gobierno’ según el código ético de Sánchez

La compra de una vivienda por parte de la ministra de Economía, Nadia Calviño, mediante una sociedad instrumental no es del agrado de Pedro Sánchez. Falta por ver si pensará lo mismo el presidente Sánchez.

«Si yo tengo en la Ejecutiva Federal de mi partido a un responsable político que crea una sociedad interpuesta para pagar la mitad de los impuestos que le toca pagar, esa persona al día siguiente estaría fuera de mi Ejecutiva. Es el compromiso que yo asumo con mis votantes y también con los españoles». Eran las palabras del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en una entrevista concedida en 2015 a Telecinco.

Entonces Sánchez era oposición y no Gobierno y, según la lógica de su vicepresidenta Carmen Calvo, quizá no era la misma persona. Lo que es claro es que, con ese listón ético activado, la ministra de Economía, Nadia Calviño, debería estar mañana fuera del Gobierno, después de haberse hecho público que compró su vivienda mediante una sociedad instrumental que le ha permitido ahorrarse miles de euros en una operación que, si bien está dentro de la legalidad, no se ajusta a las exigencias éticas del entonces líder de la oposición.

Así, según publica este viernes el diario ABC, Calviño y su marido «crearon ad hoc una sociedad -Aldael Consultores- para la operación inmobiliaria de compra de un chalet unifamiliar de 300 metros cuadrados en el madrileño barrio de Mirasierra».

«Los depósitos de cuentas presentados en el Registro Mercantil demuestran que el matrimonio se ha beneficiado del ahorro de decenas de miles de euros en impuestos a lo largo de los últimos años. Esta práctica, que es legal si las deducciones se hacen de acuerdo al criterio de la Agencia Tributaria, fue rechazada de forma meridianamente clara por Pedro Sánchez», añade el diario.

Desde el Ministerio de Economía señalan a ABC que «la ministra no tiene ninguna relación con la sociedad desde 2004», pero declinan explicar qué hizo con sus acciones y por qué usó el mecanismo descrito para adquirir su residencia.

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