El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el primer ministro de Marruecos, Aziz Ajanuch, han manifestado su deseo de «impulsar» la agenda acordada entre los dos países, que entre otras cosas incluye la apertura de aduanas en Ceuta y Melilla, y la búsqueda de nuevas oportunidades.
Así lo ha indicado el presidente en un mensaje en Twitter, tras la conversación telefónica mantenida con el jefe de Gobierno del país vecino, resaltando que ambos coinciden en «la importancia de la amistad entre España y Marruecos».
Por ello, «queremos impulsar la agenda bilateral ya acordada y explorar las nuevas oportunidades que ofrece esta relación renovada», ha señalado Sánchez, sin citar ningún punto concreto de la hoja de ruta trazada.
Lo que sí ha dicho el presidente es que España, que hasta el 31 de diciembre ocupa la presidencia de turno del Consejo de la UE, es que promoverá «una relación más estrecha» entre el reino alauí y los Veintisiete.
La decisión de Sánchez de regalar el Sáhara a Marruecos, es según él «la base más seria, creíble y realista» para una solución al conflicto abrió una nueva etapa en la relación que se tradujo en una hoja de ruta pactada en la reunión del presidente con Mohamed VI el 7 de abril de 2022.
La Reunión de Alto Nivel (RAN) del pasado febrero en Rabat sirvió para reafirmar la voluntad de los dos gobiernos de seguir avanzando en una ‘hoja de ruta’ que el Gobierno insiste en que está siendo un éxito, amparado sobre todo en los buenos datos en el plano comercial, con un aumento considerable de las cifras, y también en el migratorio, ya que las llegadas desde las costas marroquíes no han experimentado el drástico aumento que se ha registrado en otras rutas hacia Europa, como la de Italia o Grecia.
Sin embargo, aún quedan algunos aspectos importantes de lo pactado por materializar. El más destacado, por el significado que tiene, es la reapertura de la aduana de Melilla y la creación de una nueva en Ceuta. Hasta la fecha solo ha habido tres expediciones de prueba, la primera en vísperas de la RAN a finales de enero, la segunda el 24 de ese mes, y la última el 26 de mayo, en vísperas de las elecciones autonómicas y municipales.
Desde entonces, no ha habido novedades y aunque en la entrevista concedida a Europa Press a finales de agosto Albares no quiso confirmar si el adelanto electoral y la incertidumbre generada por el resultado de cara a la conformación del nuevo Gobierno había afectado, lo cierto es que todo apunta a que el calendario pactado y que nunca se ha hecho público, ha quedado aparcado momentáneamente.
Tampoco hay constancia de avances en otro capítulo que interesa sobre todo a Canarias: la delimitación de las aguas territoriales de la fachada atlántica. Ambos gobiernos pactaron la reactivación del grupo de trabajo ya existente y que llevaba quince años sin reunirse. Desde entonces, ha habido al menos dos reuniones, pero no han trascendido resultados concretos.
Además, está pendiente la nueva visita a Rabat a la que Mohamed VI invitó a Sánchez en la conversación telefónica que mantuvieron antes de la RAN para justificar que no le recibiera durante su paso por la capital marroquí. El monarca alauí no se encontraba en el país en aquel momento pero invitó al presidente del Gobierno a «realizar próximamente una visita oficial» que aún no se ha materializado.