La presidenta del Consejo de Ministros de Italia, Giorgia Meloni, ha acogido a los mandatarios de EEUU, Francia, Alemania, Canadá, Reino Unido y Japón, además de los líderes de la Unión Europea, en la reunión del G7.
Asimismo, ha invitado a una docena de líderes que no pertenecen al bloque, entre ellos al presidente brasileño, Lula da Silva, puntal de la izquierda iberoamericana y fundador del Foro de Sao Paulo, y al presidente argentino, Javier Milei. En las redes se ha viralizado el efusivo abrazo de la presidenta de la Comisión Europea en funciones, Ursula Von der Leyen, a Lula da Silva.
«Tienes todo mi apoyo para tu presidencia del G20», ha manifestado Von der Leyen, que ya felicitó a Lula tras regresar al poder en noviembre de 2022: «Estoy deseando que trabajemos juntos para abordar los apremiantes desafíos globales, desde la seguridad alimentaria hasta el comercio y el cambio climático».
En la reunión, los líderes del G7 han acordado conceder a Ucrania un préstamo de 50.000 millones de dólares (46.500 millones de euros) financiado con los intereses de los activos rusos congelados por las sanciones. El canciller alemán, Olaf Scholz, ha catalogado de «paso histórico» el acuerdo para apoyar a Ucrania. «Esto se fundamenta en la acción de la UE, donde estamos redirigiendo estos beneficios a la defensa y la reconstrucción de Ucrania», manifestó Von der Leyen.