Varios eurodiputados letones del Grupo de los Socialistas Europeos se encuentran inmersos en un escándalo de corrupción nacional. Las acusaciones efectuadas por la Justicia letona atribuyen a Andris Ameriks y Nils Usakovs delitos relacionados con el fraude y el soborno.
Según los informes de la fiscalía, la cantidad de dinero obtenido por ambos a través del empleo de tácticas corruptas ascendería a los diez millones de euros.
La fecha de tales delitos se remonta a la época en que Ameriks y Usakovs ocupaban cargos en el Ayuntamiento de Riga, concretamente en los cargos de alcalde y teniente de alcalde entre los años 2010 y 2018. La investigación llevada a cabo por la Oficina de prevención y lucha contra la corrupción (KNAB según sus siglas en letón) sostiene que ambos eurodiputados recibieron sobornos en metálico de manera mensual por parte de la empresa de transporte subcontratada por el Ayuntamiento. Unos pagos que equivaldrían al 30% del beneficio obtenido por la compañía implicada y a cambio de los cuales Ameriks y Usakovs financiaban una rebaja compensatoria del precio de los servicios de transporte a través de las arcas públicas.
Ambos eurodiputados han respondido a las acusaciones, atribuyendo la investigación a una campaña de desprestigio orquestada por el grupo del Partido Popular Europeo y del primer ministro de Letonia Arturs Krišjānis Kariņš, miembro del partido Unidad (perteneciente al grupo de los populares).
Esta no es la primera controversia en la que se ve implicado Usakovs. En 2014 resultaron polémicas sus declaraciones sobre el presidente ruso, Vladimir Putin, llegando a considerarle ante una cadena de televisión rusa «el mejor (líder) que podríamos tener» para lograr cierta estabilidad en la región. En 2018 se le sumaron además las primeras acusaciones de corrupción por malversación de fondos públicos. En una de las investigaciones un equipo de noticias acusó al actual eurodiputado del grupo socialista de malversar más de ocho millones de dinero de los contribuyentes en la promoción de su figura pública. Un motivo que condujo a que el Parlamento Europeo levantase en 2021 la inmunidad al eurodiputado a fin de facilitar la investigación.
Calificados como «la cara de la corrupción» por miembros del Consejo de la ciudad de Riga al que ambos pertenecieron, Usakovs y Ameriks se han mostrado confiados. Así lo afirmó recientemente Usakovs, quien declaró no temer acudir de nuevo a los tribunales, confiando en su capacidad de demostrar que el arreglo de la bajada de las tarifas con la empresa de transportes implicada no se llevó a cabo de forma fraudulenta.
Por su parte, la Fiscalía letona continúa con su labor de investigación, y ha solicitado ya la suspensión del aforamiento que protege a ambos eurodiputados. Corresponde al Parlamento Europeo el levantamiento de la inmunidad que permitiría que ambos sean llevados ante un tribunal; una decisión que medios como Euractiv prevén que tomará tiempo, meses o incluso años. De hacerlo en el transcurso de 2023, sería la segunda vez en un año que el Parlamento Europeo suspende la inmunidad parlamentaria a diputados de la bancada socialista.