«Ser es defenderse», Ramiro de Maeztu
La Gaceta de la Iberosfera
Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
Cobraba entre 3.000 y 6.000 euros por inmigrante embarcado

La Policía italiana desarticula una red criminal que promovía la inmigración ilegal en embarcaciones rápidas desde Túnez

Agentes de la Policía italiana. Europa Press

Agentes de la Policía de las brigadas móviles de Palermo y Trapani y las secciones de Investigación del Servicio Central de Operaciones de la Policía Estatal italiana han detenido este mes a 10 individuos, entre ellos ciudadanos italianos y tunecinos, acusados de conspiración criminal destinada a ayudar e instigar la inmigración ilegal. Formaban parte de una organización delictiva con células tanto en Túnez como en Italia que dirigía un tráfico de inmigrantes entre el país norteafricano y la costa italiana.

Según fuentes de la Polizia di Stato, estos viajes, definidos como «VIP» por algunos testigos, fueron controlados durante la investigación con sistemas de seguimiento y se realizaban a través de un servicio de transporte rápido en embarcaciones equipadas con grandes motores y con una carga máxima de 20 personas.

El transporte se realizaba previo pago de sumas de dinero que oscilaban entre los 3.000 y los 6.000 euros. En particular, la investigación desveló el papel desempeñado por la célula de Marsala, compuesta por italianos y tunecinos que prestaban apoyo logístico, identificando y organizando las embarcaciones para el transporte de inmigrantes ilegales y «reclutando» a los traficantes, generalmente tunecinos residentes en Italia.

En la célula de Marsala, según la investigación, había también un tunecino, solicitante de protección internacional, sospechoso de ser uno de los principales promotores de la organización delictiva, así como un antiguo miembro corrupto de la Policía tunecina. Este individuo se encargaba de mantener los vínculos con el máximo exponente de la célula activa en Túnez, que también era objeto de la misma orden restrictiva y que captaba a los inmigrantes decidiendo las condiciones y el precio del transporte desde las costas del norte de Túnez hasta las de Sicilia.

Durante las investigaciones se han detenido in fraganti a ocho contrabandistas, todos ellos de nacionalidad tunecina, durante cuatro desembarcos distintos, que se produjeron en la costa de Marsala; también se investigó a cuatro personas por resistirse a los buques de las autoridades italianas al haber intentado escapar a pesar de la intervención de los buques de la Guardia di Finanza (Aduanas e Impuestos Especiales), que habían acudido a interceptar las embarcaciones. En esa ocasión, los traficantes habrían ordenado disparar bengalas luminosas contra el buque militar. Durante las detenciones se incautaron además un total de cuatro lanchas neumáticas

La operación forma parte de una investigación más amplia llevada a cabo a escala internacional con la puesta en marcha de un Grupo Operativo Especial (GTO) denominado «Mediterráneo» sobre el fenómeno delictivo de la ayuda e incitación a la inmigración ilegal en las rutas marítimas. Esta actividad fomentó el intercambio de información y el apoyo operativo con Europol, algunos países europeos y oficinas de investigación. En este contexto —y para facilitar cualquier otro intercambio de información—, oficiales invitados de Europol y de la Policía tunecina están presentes en la Jefatura de Policía de Trapani. Durante las fases operativas se llevaron a cabo varios registros en los que también participaron las Unidades Especiales de la Policía Estatal.

+ en
.
Fondo newsletter