De acuerdo con un reportaje del dominical Panorama, el comunista Pedro Castillo habría plagiado el 54% de la tesis que realizó con su esposa, Lilia Paredes, para obtener el grado académico de magíster.
Se trata de la tesis titulada “La equidad de género y los aprendizajes significativos del área de personal social en los estudiantes del IV ciclo de la institución educativa N° 10465 Puña – Tacabamba – Chota”, con la cual Castillo y Paredes obtuvieron su maestría en Psicología Educativa en la Universidad César Vallejo, de propiedad del empresario y excandidato presidencial César Acuña -también acusado de haber plagiado su tesis doctoral presentada en la Universidad Complutense de Madrid-, líder del partido Alianza para el Progreso (APP), organización cuestionada por su actitud ambigua con el Gobierno comunista, pues aunque afirma ser una bancada de oposición en el Congreso, termina dándole su respaldo al oficialismo.
Panorama detalló que el documento cuenta con un marco teórico de 26 páginas, todas ellas copiadas en su totalidad de autores peruanos y extranjeros sin haberlos citado, esto tras someter el trabajo de investigación al software Turnitin.
El reportaje indicó que, además de supuestamente haber plagiado más de la mitad de su tesis, el presidente peruano y su primera dama también habrían cometido fraude académico al consignar información falsa sobre la identidad de los validadores de sus instrumentos de investigación.
Y es que Castillo y su esposa necesitaron que tres profesionales les dieran el visto bueno para emplear dichos instrumentos de investigación. Dos de ellos fueron identificados como Jhon Hualcas Reyes y Andrea Jesús Solís Díaz. Sin embargo, los datos de esta última no se encuentran en el Registro Nacional de Identificación y Estado Civil (Reniec), y al verificar los de Hualcas, los periodistas de Panorama descubrieron que los consignados corresponden a otra persona, identificada como Carme Rosa Yupanqui Briceño.
La tercera persona es Erick Carlo Figueroa Coronado, quien sí existe y su documento nacional de identidad (DNI) coincide con su nombre y firma. Para complicar las cosas a la pareja presidencial, Figueroa fue jurado de tesis del trabajo que realizaron Castillo y su esposa.
“Estuve como miembro del jurado evaluador, cumpliendo la función de vocal”, expresó Figueroa al ser consultado por Panorama.
Tipificado como delito
Especialistas entrevistados para el reportaje señalaron que el trabajo realizado por Castillo y Paredes “carece de originalidad” y no tiene mayor aporte académico. Además, está plagado de párrafos que han sido copiados y pegados, sin mayores conexiones entre ellos.
Marcel Velázquez, profesor principal de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM), dijo a Panorama que la tesis no aporta a su disciplina académica, que es la educación, pese a que este trabajo de investigación está, supuestamente, orientado a sumar al conocimiento y bibliografía académica.
“El marco teórico de esta tesis consta de 26 hojas y las 26 han sido copiadas en su totalidad. Una tesis con un marco teórico casi 100% copiado y pegado en qué calificación ingresa. No sería una tesis, es parte del fraude académico”, manifestó.
El penalista Luis Lamas Puccio indicó a Perú 21 que este caso tiene que ser puesto en conocimiento de la Fiscalía por parte de la Superintendencia Nacional de Educación Superior Universitaria (Sunedu).
“Se trataría, eventualmente, de un plagio. Un hecho que está tipificado como delito en la legislación penal”, aseveró.
Un Gobierno de plagiadores
No solo Castillo ha sido acusado de haber plagiado un trabajo de investigación. A principios de abril de este año, el dominical Cuarto Poder reveló que el ministro de Educación (Minedu), Rosendo Serna, plagió el 72% de la información que consignó en su tesis doctoral del 2019.
Según el reportaje, el titular del Minedu copió literalmente entre 28% y 30% de otras investigaciones sin cambiar, en muchos casos, una sola palabra.
Por otro lado, la titular de la cartera de Justicia, Betssy Chávez, también habría incurrido en plagio de su tesis de pregrado, elaborada en 2015. En este caso, se difundió que el 49% de su trabajo tendría similitud con otras investigaciones.