Los familiares de cuarenta disidentes presos en Nicaragua han denunciado este lunes «una sistemática política de torturas» dirigidas a «quebrar sus cuerpos y mentes», tras las visitas a los encarcelados en los últimos días.
En un comunicado conjunto leído en una rueda de prensa, los familiares han alertado de que se mantiene la falta de acceso a salud de forma adecuada y especializada, persiste la política de aislamiento, acoso constante y agresiones, entre otras violaciones de Derechos Humanos, según ha informado el diario ‘La Prensa’.
Asimismo, han denunciado la desnutrición de algunos presos: «Nuestros familiares padecen hambre y volvemos a constatar una rápida y significativa pérdida de peso, con desnutrición«, han dicho conjuntamente.
«Desde CENIDH respaldamos la denuncia de los familiares de presos políticos, que durante la séptima visita en la cárcel de El Chipote, constataron el incremento de la represión y el gravísimo estado de salud de sus parientes», ha declarado en un mensaje en su perfil oficial de Twitter el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (CENIDH).
Además, CENIDH ha instado al régimen presidido por Daniel Ortega, a cumplir las demandas de los familiares de los presos políticos expuestas en el comunicado y ha realizado un llamamiento a la comunidad internacional para que exprese su solidaridad con el país.
La Fiscalía de Nicaragua realizó juicios contra los opositores a los que tildó de «delincuentes y criminales». En este sentido, investigó delitos de traición, conspiración y corrupción en el país, una medida que afectó a quienes están detenidos en la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ) de Managua y a aquellos que se encuentran bajo arresto domiciliario.