Si bien los promotores de la vacancia presidencial contra el comunista Pedro Castillo creían tener los votos necesarios para admitir la moción a debate, las negociaciones entre el Gobierno y los líderes de las agrupaciones parlamentarias de centro e izquierda terminaron por deshacer la iniciativa de la oposición.
La noche del lunes 6, el condenado por corrupción Vladimir Cerrón, secretario general del partido oficialista Perú Libre, encabezó una conferencia de prensa improvisada junto a José Luna (Podemos Perú), Patricia Li (Somos Perú), Rodolfo Pérez (Partido Morado), Roberto Sánchez (Juntos por el Perú) y Edwin de la Cruz (Avanza País), anunciando que se habían acordado hacer un “frente” para encarar la moción de vacancia presidencial presentada por las bancadas de Avanza País, Fuerza Popular y Renovación Popular.
«Estamos seguros que tras el diálogo, tras el consenso, aun teniendo nuestras diferencias y aun teniendo esta democracia algunos defectos, debemos apostar por ella. Estamos seguros que el día de hoy la intención de vacancia ya ha fracasado, ya es historia, producto de que las fuerzas políticas hemos consensuado hacer un frente contra el otro frente que siempre ha estado empecinado en boicotear este gobierno«, declaró a la prensa Cerrón.
Además, el exgobernador de Junín expresó que, si bien como partido tienen discrepancias con el gobierno, «eso no implica, no justifica, que se tenga que apoyar un golpe de Estado, generado por el ente que tiene que ser más democrático en el país: el Congreso de la República».
Cabe resaltar que De la Cruz fue expulsado de Avanza País por contradecir la posición de la bancada, pues una de sus integrantes, la congresista Patricia Chirinos, fue quien presentó la iniciativa en el Pleno.
Tanto el pasado viernes 3 como el lunes 6, Castillo sostuvo encuentros con representantes de Alianza Para el Progreso, Somos Perú, Podemos Perú, Partido Morado, Avanza País, Juntos por el Perú y Acción Popular, además del partido que lo llevó a la presidencia, la organización marxista leninista Perú Libre, cuyo fundador, Vladimir Cerrón, ha sido considerado por la Fiscalía como cabecilla de una organización criminal. En tanto, Fuerza Popular y Renovación Popular rechazaron la invitación.
Alianza con investigados y sentenciados
Castillo -bastante crítico con los partidos y dirigentes involucrados en actos de corrupción- no dudó en pactar con líderes políticos investigados y sentenciados para salvarse de la vacancia.
Según Perú 21, no solo Vladimir Cerrón -quien cumple una sentencia de cuatro años de prisión suspendida desde 2019 y afronta varias acusaciones fiscales por hechos de corrupción por su gestión al frente del gobierno de la región Junín (2011-2014)- es un aliado cuestionado por la justicia peruana; Patricia Li, presidenta de Somos Perú, fue condenada a cuatro años de prisión suspendida en 2011 por cometer el delito de peculado siendo alcaldesa de Punta Negra (2003-2006).
Además, la titular de Somos Perú fue acusada por el delito de defraudación tributaria en el caso Balarezo. Según la Fiscalía, en 1997 Patricia Li comercializó facturas de compañías al empresario Lelio Balarezo para que este simulara gastos que su firma Balarezo Contratistas Generales S.A. nunca realizó.
Por otro lado, José Luna, dueño de Podemos Perú, cumple comparecencia con restricciones mientras es investigado por la inscripción irregular de su partido político.
Según la Fiscalía, Luna habría intervenido ilegalmente en la elección del exjefe de la ONPE, Adolfo Castillo, a fin de conseguir que su agrupación participe en elecciones.
Luna, también propietario de la Universidad Telesup, afronta un proceso por lavado de activos. El equipo especial Lava Jato le imputa haber recibido US$480 mil ilícitos de la empresa brasileña OAS para financiar la campaña a la Alcaldía de Lima de Luis Castañeda Lossio.
Otro de los aliados de Pedro Castillo, César Acuña, líder de Alianza para el Progreso (APP) y excandidato presidencial, es investigado por lavado de activos.
Acuña es investigado por la adquisición de un inmueble -valorizado en 1 millón doscientos mil euros– ubicado en la urbanización Soto de La Moraleja, una de las zonas más exclusivas de Madrid. La compra se realizó en octubre del 2016 y se pagó al contado.
“Negociación entre cuatro paredes se tumbó la vacancia”
Para el excongresista César Combina, Castillo negoció votos a su favor para salvarse de la admisión de la moción de vacancia.
Según Combina, estos hechos habrían ocurrido durante los días de reuniones que tuvo el presidente peruano con líderes políticos y con legisladores de algunas bancadas que visitaron Palacio de Gobierno.
“Pedro Castillo negoció votos en Palacio para salvarse de la vacancia. Le gusta reunirse con gente entre cuatro paredes para negociar, lo hacía en su búnker de Breña y ahora lo hace desde Palacio”, sostuvo el exlegislador en diálogo con Correo.