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son cada vez más evidentes

Siguen las pugnas internas del Frente Sandinista de Liberación Nacional entre paramilitares y la esposa de Ortega

El dictador sandinista Daniel Ortega y su esposa Rosario Murillo
El dictador sandinista Daniel Ortega y su esposa Rosario Murillo. Europa Press

Las pugnas de poder a lo interno del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), son cada vez más evidentes entre paramilitares, los llamados “combatientes y colaboradores históricos” y Rosario Murillo, la vicepresidente y esposa del dictador sandinista Daniel Ortega, a quien los “históricos” acusan de haber tomado el control de ese partido.

Los llamados “combatientes y colaboradores históricos” son oficiales en retiro del Ejército, la Policía y la Seguridad del Estado, mantienen estrechos vínculos con esas instituciones. A partir de 2018 forman parte de las estructuras paramilitares que junto a la Policía desarticularon las protestas contra la dictadura de Ortega a fuego y sangre dejando al menos 355 muertos por la represión.

El conflicto representa una seria crisis en el seno del partido izquierdista porque involucra a “paramilitares”, que poseen armas y tienen experiencia militar. Uno de los “combatientes históricos” que crítica a Murillo púbicamente es Marlon Sáenz, conocido como el “chino Enoc” y ha dejado en evidencia la magnitud de las pugnas porque increpa a Ortega por permitir las acciones de Murillo que recientemente ordenó desaparecer las estructuras del “sandinismo histórico”. 

A la división del sandinismo oficialista se suma la escalada represiva del régimen en los últimos días. Seis arrestos se han registrado en los últimos días, entre ellos cuatro artistas, dos de ellos familiares del subdirector del Teatro Nacional Rubén Darío, Salvador Espinoza, un estrecho colaborador de Murillo.

Salvador Espinoza (hijo) y su esposa Xochilt Tapia, dueños de Producción SaXo, son los familiares del subdirector del Teatro Nacional. Leonardo Canales, director y productor de La Antesala y a José Monroy, vocalista de banda Monroy & Surmenage, también están en la lista de detenidos.

De acuerdo con medios nicaragüenses, los artistas habrían sido detenidos por interpretar canciones críticas al régimen, y apuntan a que el hijo de Ortega y Murillo, Juan Carlos Ortega Murillo, quien se define como “músico” y es promovido por el mismo régimen de sus padres con fondos del erario, estaría detrás de las detenciones.

Una de esas interpretaciones críticas es “En el ojo del huracán”, cuyas letras hacen alusión a las protestas de abril de 2018.

Hasta el cierre de este reporte se desconocía oficialmente el paradero de los detenidos. Extraoficialmente se conoce que estarían en las celdas de El Chipote, donde permanecen los presos políticos que fueron encarcelados en el contexto electoral de las presidenciales.

Luciano Montti, un intelectual y analista que se identifica con ese nombre por razones de seguridad, dijo que la ola represiva está alcanzando a estratos de la cultura en Nicaragua, específicamente a grupos jóvenes de rock “que curiosamente en algún momento fueron protegidos de una u otra forma por el mismo régimen, recordemos que la esfera cultural esta monopolizada por los medios de comunicación del oficialismo, específicamente por el hijo de la pareja gobernante que es el propietario de Canal 8, y de la emisora Rock FM, que ha monopolizado la esfera musical”.

Se refiere a Juan Carlos Ortega Murillo, quien se “convirtió” en dueño de medios gracias a la ayuda petrolera venezolana, fondos con los que sus padres compraron medios de comunicación, entre ellos varias televisoras.

Según el diario La Prensa, tras las detenciones algunos artistas estarían “escondidos” y otros considerando migrar ante la amenaza de nuevas detenciones.

Los trapos sucios del sandinismo

“Las pugnas en el FSLN parece ser que han gestado un movimiento que esta encaminado a desplazar en primera instancia a Rosario Murillo de las esferas de poder, y de no ser posible sería a la pareja presidencial. Existe la percepción que hay una negociación en ciernes entre las distintas facciones del sandinismo, la disidente que – gobernó con Ortega durante los 80 – está concentrada mayoritariamente en Costa Rica y la interna que se dan por llamar ‘colaboradores y combatientes históricos’, la rama más bélica del partido compuesta por militares en retiro y paramilitares al mando de (el ex jefe de la tenebrosa Seguridad del Estado), Lenin Cerna, lo que antes se conocía como los “comandos electorales”, preciso Montti.

Cerna, considerado como líder de los “combatientes históricos” es un enemigo de Murillo, ella lo separó del partido y del círculo cercano a Ortega.

“La pugna interna ha alcanzado a estos grupos musicales porque muchos de ellos son hijos de altos mandos en retiro, de combatientes y colaboradores históricos”, explicó, esto pese a que han sido incondicionales de Ortega durante las dos dictaduras sandinistas.

Uno de los hijos del coronel en retiro Noel Portocarrero, es uno de los músicos del grupo Monroy y Surmenage, que interpreta “El ojo del huracán”.

“El régimen teme un nuevo levantamiento que podría sumar no solamente al sandinismo disidente también al llamado sandinismo histórico. La ola represiva se ha incrementado y es muy posible que próximamente alcance a gente dentro del mismo gabinete de Gobierno”, asegura el analista.

“Rosario Murillo ha sido declarada enemiga número del FSLN por los combatientes históricos y esto parece tener adeptos dentro de las estructuras del Ejército y de la Policía y al parecer ha puesto más nerviosos a los gobernantes. Desafortunadamente esa pugna interna dentro de un partido, que tiene todas las características de operar como lo hace la mafia, está golpeando a la sociedad en general y al antisandinismo, ese nos vuelve más vulnerable a esta ola represiva”, indicó.

El analista estima que las pugnas en el FSLN podría ser el fin de la dictadura debido a la enemistad de Murillo con los paramilitares.

“La crisis interna del FSLN es una crisis real y que día a día va sumando enemigos en contra de la pareja presidencial porque estamos viendo que no solo le ha afectado en el ámbito diplomático con la deserción de estrechos colaboradores de vieja data como el asesor internacional de Ortega, Paul Reichler, y el embajador de Ortega en la OEA, Arturo McFields, y las diplomáticas [Fernanda y Michelle] Gutiérrez, hijas del diputado sandinista Walmaro Gutiérrez, y otros cuadros que han ido saltando del barco. Se sabe que algunos secretarios políticos a lo largo y ancho del país han salido por veredas rumbo a Estados Unidos y Costa Rica”, apuntó.

“La crisis es real y peligrosa que es muy posible termine en un levantamiento armado en un golpe de Estado que yo llamo silencioso”.

Agregó que hay fuertes rumores que señalan que Ortega de 76 años, estaría afectado de salud.

Un informe del organismo Monitoreo Azul y Blanco revela que los días 11 y 12 de abril se registraron 29 denuncias de violaciones a los derechos humanos relacionadas con las detenciones, hostigamientos a opositores, allanamientos a 11 residencias, y amenazas a integrantes de organizaciones políticas, a excarcelados y a artistas. Los otros dos detenidos son familiares de un preso político y de un ex reo de conciencia. 

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