Desde Vilaweb hasta la CUP, los separatistas llaman a tomar la calle el viernes para defender la nueva república catalana.
Viernes 27. El Senado reunido para aprobar la aplicación del 155; el Consejo de Ministros preparado para adoptar medidas concretas y responder al pleno que horas antes, el jueves por la mañana, habrá tenido lugar en el Parlamento catalán, para, previsiblemente, proclamar la República Catalana. Es el día clave para el futuro de España y, conscientes de ello, los radicales separatistas calientan ya la calle.
“Ahora todo se encara a viernes. (…) será el día que el Parlamento de Cataluña tomará medidas claras”, comienza su editorial el diario separatista Vilaweb, que yerra el tiro por unas horas [el pleno del Parlament será, finalmente, el jueves]. Firmado por el valenciano Vicent Partal, el artículo asegura que “la única medida razonable” el próximo viernes “será la activación de la república”.
A las barricadas
Y, una vez activada la república, el siguiente paso es tomar la calle. “Nosotros también tendremos una importante labor. Más importante que la suya (…) Viernes por la noche, cuando en Madrid y Barcelona se cambian simultáneamente las reglas del juego, todo, todo lo que hemos conocido hasta hoy, dejará formalmente de ser legal, y todo, por lo tanto, pasará a ser una cuestión, una lucha, de hechos. Y aquí la ciudadanía organizada en la calle seremos quienes determinaremos quién gana y quién pierde. El viernes por la noche, la República Catalana y la nueva vieja España sin autonomías enfrentarán en todos los terrenos y en cada decisión. Y quien demuestre sábado, y domingo y lunes y martes y miércoles y jueves y viernes, que es el gobierno efectivo y real del Principado ganará. Sólo será cuestión de tiempo. Si los Mossos obedecen a la Generalitat, ganaremos; y si los controla Rajoy, perderemos. Si los bancos actúan respetando la legalidad, ganaremos; y si continúan secuestrando nuestro dinero a las órdenes del PP, perderemos. Si los ayuntamientos hacen caso de las órdenes de los ministros españoles, perderemos; y si las ignoran, ganaremos. Si las escuelas mantienen su modelo, ganaremos; y si lo cambian, perderemos. Si los diputados pueden entrar y sentarse en su escaño, ganaremos; y si no es así, vamos a perder. Si la policía española logra entrar en palacio para detener a Puigdemont, perderemos; y si lo impedimos entre todos, entonces ganaremos”.
‘Gas a fondo’
“No hay otra posibilidad. Así que gas a fondo y prepárese. Los mismos que no fueron capaces de encontrar ni una sola urna ahora dicen que nos gobernarán. Los mismos a los que burlaron el ejército de los cuatro mil clandestinos de los referéndum ahora dicen que nos controlarán. (…) el próximo fin de semana será el más importante, políticamente hablando, de nuestras vidas”.
La arenga de Partal no es la única que llama a llenar las calles. También los antisistema de las CUP, a través de Poble Lliure , insisten en la movilización ciudadana: La república, dicen “deberá ser defendida con las mismas grandes dosis de movilización popular, cívica y masiva que nos han llevado hasta donde ahora nos encontramos: a un paso de la libertad”. Convencidos de que “la desobediencia civil” supondrá “una puerta abierta a la democracia para el resto de pueblos actualmente oprimidos por el régimen monárquico y post-franquista español”, los de Poble Lliure llaman al Gobierno catalán a proclamar inmediatamente la República Catalana y “al conjunto del pueblo catalán, nuestras entidades, sindicatos, y sociedad civil en general a la movilización en defensa de nuestras instituciones, de la República catalana, por la salida de las fuerzas de ocupación españolas, por la libertad de los presos políticos y para abrir el proceso constituyente de la nueva República”.
La ‘resistencia no violenta’ más violenta
Así las cosas, lo previsible es que las calles catalanas se conviertan, el próximo viernes, en un nuevo escenario de violencia y agresiones por parte del radicalismo golpista, bien aleccionado por los jóvenes de Arran, contrarios a la resistencia pacífica -a la que califican de contrarrevolucionaria- y más partidarios de agredir a los agentes de Policía, por ejemplo, tal como señalan en el documento de guerrilla distribuido desde las CUP.
Así es el manual de terrorismo callejero difundido por la CUP
Alguna publicidad valiente y la ayuda desinteresada de muchos lectores como tú han hecho posible esta noticia. Conoces nuestra línea editorial, a contracorriente de la ideología dominante y desacomplejadamente comprometida con la dignidad humana, la unidad de España y la identidad de Europa. No es fácil ni es barato sostener un medio de comunicación que beba de estos postulados, siempre contra los más poderosos. Por eso te pedimos que nos ayudes con una aportación, que formes parte de nuestro proyecto, que ayudes a que sigamos incordiando al Poder. Puedes hacerlo de varias maneras, infórmate aquí.
