La AEGC advierte a Zoido que «es necesario un relevo urgente». «Voluntarios, estamos seguros, no faltarán», añade.
La Asociación Española de Guardias Civiles (AEGC) ha pedido al Ministerio del Interior, Juan Ignacio Zoido, el relevo de los agentes de refuerzo en Cataluña «ante la dilación en el tiempo de la crisis» en esta comunidad autónoma y el «malestar y agotamiento» de los agentes.
La AEGC recuerda que muchos de ellos llevan un mes reforzando la seguridad en Cataluña, «descansando en muchos casos un solo día a la semana y viendo cómo se han vuelto a sacar del cajón los tantas veces denunciados tripletes, y todo ello aguantando estoicamente los escraches en los hoteles y viviendo en barracones militares».
«Además hay que añadir a toda esta tensión laboral el alejamiento de las familias y las dudas sobre cómo estarán viviendo todo lo que ven en los medios de comunicación», agrega.
Los agentes lamentan que «la crisis no tiene a corto plazo visos de solución y los guardias civiles no pueden ni deben afrontar los siguientes días y semanas en esta situación».
Por ello comunica al ministro que «es necesario un relevo urgente, personal de refresco que sea el encargado de continuar con la labor que han estado realizando brillantemente» los agentes desplazados a Cataluña, y apostilla: «Voluntarios, estamos seguros, no faltarán».
Esta organización reclama además que se respete a todos los integrantes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado la cadencia de turnos y horarios.
«Porque si los dos cuerpos -Guardia Civil y Policía Nacional- han ido para hacer las mismas funciones no se entiende que a nosotros nos hayan dejado sin jornada laboral y sin descansos durante todo este mes de servicio en Cataluña», denuncia.
La AEGC lamenta que a pesar de que ya avisó al ministro de este malestar, los agentes «han tenido que enterarse por la prensa de la posible fecha de salida».
«No deje pasar más tiempo y cumpla con los guardias civiles, ordene ya su relevo y no prorrogue más esta situación agotadora para ellos y agónica para sus familias«, insiste.
Por último piden al ministro que «cumpla también defendiendo el trabajo de sus subordinados por vía judicial» y entiende que acusaciones de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, por actuaciones de los agentes «atentan contra su honor y debería haber sido el primero en exponer su repulsa».