«Ser es defenderse», Ramiro de Maeztu
Este artículo se publicó en La Gaceta antes de convertirse en La Gaceta de la Iberosfera, no siendo entonces propiedad de Fundación Disenso.

Rajoy abre la convención del PP reivindicando su legado y pidiendo huir de sectarismos

Mariano Rajoy, en su tono habitual, ha sacado pecho de los datos económicos que ha dejado su gobierno, mientras que el actual secretario general, Teodoro García Egea, ha sido más apasionado: ‘a nosotros la izquierda no nos da lecciones’.

Seis meses después de dejar el PP en manos de Pablo Casado, Mariano Rajoy se ha reencontrado con el partido que lideró durante quince años, y en un momento en el que tanto se habla de polarización ideológica ha recomendado a los suyos que se mantengan en sus principios y huyan del sectarismo.

Lleva apartado de la vida pública desde que perdió el Gobierno, y en su vuelta a un escenario político, en este caso el de la convención nacional del PP, Rajoy ha entablado un diálogo -que no tertulia, porque a estas alturas, ha dicho, no se va a hacer tertuliano- con su amiga y presidenta del Congreso, Ana Pastor.

Y mientras el líder del PP, Pablo Casado, y otros dirigentes seguían desde primera fila su intervención, otra amiga de Rajoy, alejada ya de la política como él, asistía desde segunda fila a la reaparición del expresidente: la que fue su número dos en el Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría.

Rajoy ha recibido esta tarde varias ovaciones. Al llegar, al ser citado por el candidato del PPE a la Comisión Europea, Manfred Webber, y al subirse al escenario para participar en esta charla con Pastor.

Por eso subrayaba nada más empezar su agradecimiento por el cariño recibido, mientras al final confesaba estar «estupendamente» y valoraba lo «bien» que le trata la gente.

Con sus conocidas expresiones como aquella de «como en todas las facetas de la vida», que a más de uno le han provocado una sonrisa nostálgica, Rajoy comenzaba defendiendo la Constitución frente a tanto «intelectual de baja estopa» que busca cambiarla.

Después le ha llegado el momento de reivindicar su legado, y ha recalcado que «fue el Gobierno del PP -el suyo- el que tomando decisiones difíciles», algunas «no entendidas» logró devolver a España el crecimiento y la creación de empleo.

«El PP ha hecho algunas cosas importantes a lo largo de la historia y sería bueno continuar en el futuro», ha comentado Rajoy ante el plenario, en el que aconsejaba a los suyos algo muy sencillo: «trabajar, trabajar muchísimo».

Pero sobre todo ha querido lanzar un mensaje de sosiego y moderación al partido, al que ha recordado que es la «organización más potente» del país y por tanto puede y debe mantener sus posiciones frente a vaivenes externos.

Y quien tantas críticas recibió por un sector del PP -que ahora está de vuelta- que le reprochaba siempre no tener presentes los principios y valores del partido, ha hecho hoy más de una recomendación ideológica.

Por ejemplo, ha pedido a los suyos mantener sus posiciones, defenderlas y tener siempre unos principios «claros».

Y aunque no ha citado a nadie, ni siquiera al principal rival que tiene el PP, Vox, Mariano Rajoy ha pedido al partido que se mantenga «en la realidad» y huya de «los doctrinarios» y el «sectarismo».

También ha pedido a este nuevo PP que ya no lidera que tenga «aguante» y que «no se asuste por una crítica, dos, cincuenta o ciento cincuenta», además de pedir a todos que huyan de la demagogia, sobre todo cuando hablen de cuestiones de política social.

Dicen en el PP que ha sido Rajoy quien ha elegido este formato de diálogo, distinto al que tendrá este sábado el otro expresidente del partido, José María Aznar -que intervendrá solo-.

Lo cierto es que el expresidente, que desde el primer momento con su marcha, dijo ponerse a las órdenes de Casado, ha optado por una intervención más discreta. Pero eso no ha impedido que se haya llevado el caluroso homenaje del plenario de los populares.

«No podríamos entender este partido ni lo que somos sin que tú hubieras existido. No podríamos estar hoy aquí sin tu generosidad sin tu compromiso sin tu trabajo sin tu modo de hacer las cosas», le ha dicho Ana Pastor, reivindicando también, con firmeza, la figura de su compañero y amigo.

Y tras escuchar halagos y recibir aplausos, Rajoy se ha vuelto a ir de Ifema como hizo aquel 21 de julio tras la elección de Casado, con discreción y sin alharacas -otra de sus palabras favoritas-.

No sin antes admitir que es feliz. Porque tiene la suerte, ha dicho, de olvidarse de las cosas malas que le pasan. Y eso sí que es suerte.

Ana Pastor entrevista a Rajoy

La presidenta del Congreso ha inaugurado una nueva modalidad en las convenciones del PP: la entrevista. Ha sido el expresidente del Gobierno, Mariano Rajoy, quien se ha sometido a las preguntas de Ana Pastor.

Siete meses después de perder el Gobierno, Rajoy ha admitido que ha tenido momentos en los que lo ha pasado «francamente mal», pero se queda «con lo bueno», y ha asegurado estar ahora «estupendamente».

Tras subrayar que este partido es probablemente la organización más «potente» de España, Rajoy ha recomendado al nuevo PP que tenga «aguante» en los momentos difíciles y «no se asuste» cuando reciba «una crítica, dos, cincuenta o ciento cincuenta».

«Este es un partido en el que por general todos nos hemos respetado unos a otros y eso es sin duda una buena línea de trabajo para el futuro», ha dicho el expresidente.

Rajoy ha abordado la importancia de la Constitución y la labor del PP para defenderla. También ha enumerado el papel de la formación en la lucha contra ETA, la defensa de la Constitución o la construcción del Estado de las Autonomías.

El expresidente ha ahondado en sus recuerdos durante su larga etapa en el seno del PP. «Lo mejor que me ha pasado durante estos años es que he tenido la oportunidad de conocer toda España», ha indicado. Rajoy ha recordado su etapa como concejal, como secretario concejal de la formación, y ha hablado con gratitud de su fase en la Diputación de Pontevedra.

‘A nosotros la izquierda no nos da lecciones’

El secretario general de la formación, Teodoro García Egea, ha enumerado algunos de los nombres de personalidades que han formado parte de la historia del PP. Ha hecho mención a la primera alcaldesa de la democracia, Pilar Pulgar, o el concejal de Elorrio, Carlos García, que plantó cara a ETA.

»Hace treinta años este partido se unió, que se refundó bajo el impulso del presidente Fraga», ha indicado García Egea. »Trabajamos muy duro para acabar con catorce años de socialismo en España. Las primeras mayorías se dieron en el 96 y en el 2000 porque había un partido unido», ha explicado en referencia a José María Aznar.

»La izquierda volvió a arruinar el país. Pero ahí estaba el presidente Rajoy, el PP al que los españoles siempre le encargan la reconstrucción de España», ha continuado. «En 2019 llegó Pablo Casado y lo primero que hizo fue conquistar Andalucía de la mano de Juanma Moreno después de 36 años de gobiernos socialistas», ha enfatizado.

‘Estoy orgulloso de ser del PP’

El presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, ha sido el segundo interviniente, tras el candidato del PPE a presidir el Parlamento Europeo, Manfred Weber, de la convención del PP. A él le ha encargado el partido coordinar el encuentro. Feijóo ha defendido su orgullo y el de muchos militantes de formar parte del Partido Popular.

Feijóo ha advertido al resto de partidos de que ninguno puede dar al PP lecciones «de moderación, centralidad ni de coherencia» y ha subrayado que no son una formación «ansiosa» porque desde la ansiedad no se defiende el interés general.

Con una intervención plagada de alusiones indirectas a Vox, Feijoo, como coordinador de la convención, ha inaugurado este cónclave programático destacando que el PP es una formación con las ideas claras y no es ni una veleta ni practica la «dureza intransigente» y tampoco trata de imponer sus principios.

Durante la apertura ha elogiado «la gestión incuestionable» del expresidente del Gobierno Mariano Rajoy, su sentido común y el hecho de que haya sabido irse «con elegancia y con sus principios intactos. Gracias presidente».

No tan efusivo se ha mostrado con otro expresidente del Ejecutivo, José María Aznar, de quien se ha limitado a decir que bajo su presidencia «convirtió a España en una de las naciones más potentes del mundo».

‘Es el primer paso para recuperar el Gobierno’

El presidente del PP, Pablo Casado, ha situado la convención nacional del partido como «primer paso» para recuperar el Gobierno de la nación y «punto de arranque» importante para las próximas elecciones del mes de mayo, además de una oportunidad de abrirse a una sociedad que «echa de menos» al partido.

En declaraciones a la entrada de la convención, ha asegurado que el partido quiere abrir «puertas y ventanas» a la sociedad civil con expertos que van a dar su opinión y unos candidatos «ganadores» que van recuperar las autonomías en las que el PP en el año 2015 no consiguió ser la fuerza mayoritaria.

Casado ha dicho que va a «quedar claro» que en España solo hay una alternativa entre un Gobierno de socialistas, populistas e independentistas «aliados con los batasunos» y otro «liderado» por el PP «que vuelva a recuperar la economía, el prestigio internacional y salvaguardar el Estado de bienestar».

«Quiero que el PP se abra a esa sociedad que nos echa de menos y que está deseando volver a confiar en nosotros», ha concluido.

Rajoy y Casado entran juntos

Pablo Casado, y el anterior líder del partido y expresidente del Gobierno Mariano Rajoy han entrado juntos a la convención de los populares que se inicia esta tarde.

Al son de la nueva versión del himno del PP, Casado y Rajoy han entrado en el plenario acompañados de otros dirigentes como el secretario general, Teodoro García Egea, el candidato del PPE a presidir la Comisión Europea, Manfred Weber, las vicesecretarias Cuca Gamarra y Andrea Levy y el portavoz en el Parlamento Europeo, Esteban González Pons.

Todos ellos han subido al escenario y después han seguido saludando a asistentes y dirigentes como el presidente gallego y coordinador de la convención, Alberto Núñez Feijóoy, o el presidente de Castilla y León, Juan Vicente Herrera.

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