«Ser es defenderse», Ramiro de Maeztu
Este artículo se publicó en La Gaceta antes de convertirse en La Gaceta de la Iberosfera, no siendo entonces propiedad de Fundación Disenso.

Los audios que prueban que la ministra Delgado mintió sobre su relación con Villarejo

El presidente del PP, Pablo Casado, señala que las grabaciones «demuestran una mentira y probablemente exigen una explicación» por parte de la ministra.

Este lunes el digital Moncloa.com difunde los audios correspondientes a una comida que fue grabada por el comisario Villarejo en 2009, comida en la que también participaron el juez Baltasar Garzón, la hoy ministra de Justicia, Dolores Delgado y altos mandos policiales. Comida en la que se comentan «asuntos judiciales, policiales y personales». Y todo, después de que la titular de Justicia asegurara el pasado 17 de septiembre que era «radicalmente falso» que ella hubiera mantenido una cita con Villarejo. Se acumulan los problemas para el Ejecutivo Sánchez. Se lo contamos…

La grabación de Moncloa.com

23 de octubre de 2009. El comisario Villarejo, explica Moncloa.com, invita a seis personas a una comida de agradecimiento para festejar una medalla al mérito que le acababan de conceder. En la comida, celebrada en el madrileño restaurante Rianxo, están presentes la entonces fiscal de la Audiencia Nacional y hoy ministra de Justicia, Dolores Delgado; el exmagistrado Baltasar Garzón, buen amigo de la ministra; el entonces director adjunto operativo (DAO) de la Policía Nacional, Miguel Ángel Fernández Chico, y dos mandos policiales adjuntos al DAO de aquella época: Enrique García Castaño, alias ‘El Gordo’ y Gabriel Fuentes. «A lo largo del almuerzo -señala Moncloa.com- la entonces fiscal de la Audiencia Nacional se comportó como una colega más, con absoluta familiaridad».

Fue Villarejo el que colocó un dispositivo de grabación para recoger todo lo que se dijera en aquel encuentro -más de cuatro horas de grabación- en el que los comensales disfrutaron de un suculento menú – «tortillas de patatas, jamón serrano con tomate, ‘xoubas’ con pimientos, almejas al natural, lubinas y solomillos»- regado con un Pago de Capellanes. Y… ¿qué se dijo?

Los piratas del Alakrana

Sobre la llegada a España de dos piratas somalíes detenidos por la Armada en el secuestro del pesquero ‘Alakrana’, la hoy ministra -entonces fiscal y, según los comensales pareja de Baltasar Garzón (siempre según la versión de Moncloa.com)- asegura que España está dando una imagen de país bananero. y “de coña”. “Lo que pasa es que no tenían que haber traído a ninguno de los dos, eso lo primero”, dice Delgado.

Luego hablan los demás, y hablan de las condiciones sanitarias en las que ha llegado el pirata: “Ni menor ni pollas. Tiene dermatitis, tiene sífilis, me cago en Dixx, que cuando lo llevaron al hospital –el Gregorio Marañón-, ¿por qué te crees que venía con un mono blanco?”, advierte uno de los comisarios.

Garzón, que se incorpora a la conversación después de haber ido a recuperar el móvil que se había dejado en el coche, critica “lo torpes” que han sido los mandos de Defensa en este asunto y señala que habría sido más fácil «aprovechar el limbo jurídico y utilizar a los piratas detenidos como ‘moneda de cambio’”.

Tras criticarse la falta de determinación del JEMAD -entonces el hoy dirigente podemita Julio Rodríguez- al no ordenar un abordaje, Garzón sentencia: “Que mueren una persona, que mueren dos. ¡Qué le vamos a hacer! En la vida, aquí puede haber un atentado y que mueran cincuenta”. Otro de los comensales parece zanjar el asunto con un revelador: “Si es menor y dice que quiere estar en Somalia (…) le coges y le metes en un avión y pum: a tomar por culo y te quitas del medio al negrito”.

Críticas a sus compañeros de profesión

Al entonces presidente de la Audiencia Nacional se refiere Garzón como el “acojoneras Angelito Juanes”, y se burlan también en la comida del magistrado Santiago Pedraz, que  se había encontrado ese día con que el fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, está sugiriendo una posible “prevaricación” con los piratas somalíes. “Se ha quedado el chaval con un agobio…”, dice Delgado.

Poco después, la hoy ministra abandona la comida para ir «a por su niña», y lo hace acompañada del exjuez Garzón, lo que genera un comentario por parte de Villarejo: «Ay, qué malandrín».

La reacción de la oposición

Tras la difusión de los audios, el presidente del PP, Pablo Casado, ha considerado que las grabaciones «demuestran una mentira y probablemente exigen una explicación» por parte de la ministra.

Casado ha destacado que Delgado es «la notaria mayor del reino y ha negado una información que tendrá que decir por qué la ha negado». El líder del PP ha recordado que Delgado va a ser reprobada en el Senado a instancias de su partido, que también reclamó en verano su dimisión por haber dejado a la «jurisdicción española absolutamente vendida» ante la querella en Bélgica contra el juez Pablo Llarena por el caso del «procés».

«El problema es la mentira porque dijo que no conocía prácticamente más que en el ámbito casual a un comisario que ahora está en prisión preventiva», ha dicho Casado, y que a partir de las grabaciones conocidas hoy parece que ser que hubo conversaciones «muy cordiales y muy amistosas».

También ha manifestado que igual el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, tendrá que «ir aflojando el baremo de exigencia» porque en cien días ha perdido a dos ministros y «tiene a unos cuantos más con escándalos encima de la mesa».

A su juicio, ahora se está hablando de que «ha podido haber una intermediación en una estructura parapolicial de la que tendrá que da cuentas» la ministra.

Esto se une a que, según Casado, se está viendo «cierta connivencia en las indicaciones que se dan a las jueces para mediar en la situación procesal de los presos independentistas de Cataluña», aparte del «abandono» a estos jueces por parte del Gobierno.

Villarejo seguirá en prisión tras amenazar con destapar información sensible

Editorial multimedia: La guerra entre Villarejo y Sanz Roldán

TEMAS |
+ en
Fondo newsletter