La coalición oficialista de centroderecha chilena no logró asegurar un tercio de los delegados que redactarán una nueva Constitución, cifra clave para bloquear directamente eventuales cambios drásticos, según el conteo oficial de casi 40% de los votos.
De los comicios de dos días, donde además se escogían gobernadores, alcaldes y concejales, saldrán los 155 integrantes del órgano de acuerdo con los votos obtenidos por lista.
El presidente del consejo directivo del Servicio Electoral de Chile, Andrés Tagle, ha presentado los primeros resultados oficiales, donde la lista de independientes acumula el 34,97%.
En este sentido, los candidatos de las 83 listas independientes concentran 756.985 votos, seguidos de la lista oficialista Vamos por Chile, que aglutina el 21,62% de los sufragios.
Les siguen la lista de Apruebo Dignidad con el 18,04% de los votos y Lista del Aprueba con el 15,1%, según recoge la emisora local Bio Bio.
De acuerdo con fuentes de La Gaceta los convencionales independientes electos son en su mayoría de tendencia izquierdista, por lo que la derecha se ve en desventaja para negociar durante la redacción de la próxima Constitución.
De acuerdo con Daniela Carrasco, analista de La Gaceta de la Iberosfera en Chile, con estos resultados «podemos dar cuenta que el país ha virado hacia la izquierda. En las candidaturas de los convencionales constituyentes, podemos ver que la centroderecha y la derecha no alcanzan el tercio esperado».
«Se puede decir que aquellos candidatos con liderazgos fuertes y claras convicciones, distinguiéndose del centro político y las izquierdas, tuvieron más éxito. Esto se ve con los candidatos de la Unión Democrática Independiente y los Republicanos. Por otro lado, se puede ver que la izquierda ha obtenido una hegemonía cultural, pues no solo sus listas tuvieron éxito, sino que también los independientes con posibilidades de salir electos adhieren a esta ideología. Por último, podemos señalar que esta es la consolidación de la revuelta del 18-O y que el proceso de subversión sigue su curso en el proceso constituyente», concluyó Carrasco.
