En sintonía con las izquierdas bolivarianas que vienen socavando Hispanoamérica, el comunista Pedro Castillo anunció este jueves que pedirá al Congreso peruano una Asamblea Constituyente una vez jurado el cargo de presidente el próximo 28 de julio.
“Llegando al poder no seremos sordos ni mudos, como siempre hemos criticado. Por eso, el 28 de julio, iniciado el mensaje a la nación, vamos a poner frente al Congreso el primer pedido del pueblo: que agende inmediatamente la instalación de la Asamblea Nacional Constituyente para redactar la primera Constitución del pueblo”, dijo durante una reunión con sindicalistas.
Aunque todavía no es proclamado jefe de Estado electo por el Jurado Nacional de Elecciones (JNE) -la institución todavía resuelve los pedidos de nulidad y apelaciones para dar un pronunciamiento oficial-, Castillo ya se siente presidente, y asegura que no podría resolver los problemas del país con prontitud por culpa de la Constitución vigente, que data de 1993 y es asociada directamente con el expresidente Alberto Fujimori, que la impulsó.
“El 28 de julio, asumiendo el mandato, no me puedo convertir en un mago para resolver los problemas de inmediato, porque nos tiene atados esta Constitución”, añadió.
Según el candidato izquierdista, “no es necesario” redactar una nueva Constitución “con tantos artículos y capítulos”, sino una con “olor, color y sabor a pueblo”.
En esa línea, el secretario general de Perú Libre y sentenciado por corrupción, Vladimir Cerrón, recordó que el llamado a una Asamblea Constituyente, a la que bautizó como “plurinacional” -al estilo boliviano- es un “compromiso irrenunciable” del partido.
“La Asamblea Plurinacional Constituyente es un compromiso irrenunciable del Partido y del Gobierno, legítimos voceros del pueblo peruano. Las tiendas políticas deben facilitar este pedido para decidir democráticamente en las ánforas y no en 130 escaños”, escribió en Twitter.
Congresista electo investigado por terrorismo inicia recolección de firmas
Guillermo Bermejo, congresista electo por Perú Libre, anunció que ya se inició la recolección de firmas para consultar a los ciudadanos si están a favor o en contra de reformar “de manera total la Constitución Política” del Perú y convocar una Asamblea Nacional Constituyente.
En conferencia de prensa con la Mesa de Abogados por la Democracia, recordó que este fue compromiso de campaña electoral del partido liderado por Vladimir Cerrón.
“Hemos tenido estos días llamadas maravillosas de decenas de organizaciones populares que se van a sumar, cada uno desde distintos rincones de la patria, a la recolección de firmas. Hay que explicarlo rápidamente […] el planillón es bastante claro […] dice con claridad. ‘Referéndum para que se consulte a la ciudadanía electoral del Perú para reformar de manera total la Constitución Política del país del año 1993 a cargo de una Asamblea Nacional Constituyente’”, declaró.
El controvertido legislador, recordado por los audios donde aseguraba que si llegaban al poder “no lo van a soltar”, y que en el partido Perú Libre no creen en “pelotudeces democráticas”, señaló que para convocar el referéndum necesitan recolectar aproximadamente dos millones y medio de firmas. No obstante, su compromiso es de cinco millones de rúbricas.
“Para nosotros poder llegar a referéndum, a la Asamblea Nacional Constituyente, necesitamos recolectar más o menos dos millones y medio de firmas. Una vez recabadas esas firmas, estas van a los organismos electorales para verificar si son o no correctas. El Congreso no tiene nada que hacer en esta cuestión”, explicó.
Bermejo, investigado por los presuntos vínculos que tendría con la columna terrorista encabezada por los hermanos Quispe Palomino en el Valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro (Vraem), zona dominada por el cultivo ilegal de hoja de coca, ha sido señalado por testigos protegidos de haberse desplazado de forma “consciente y voluntaria” a los campamentos subversivos, por lo que el Ministerio Público solicitó 20 años de prisión en su contra, una reparación civil de 100 mil soles (21 800 euros) e inhabilitación para ejercer cargo público por el tiempo de la pena. A pesar de afrontar un juicio por el delito de terrorismo, el JNE le entregó las credenciales que lo habilitan a ejercer como parlamentario entre 2021 y 2026.
“Receta del Foro de Sao Paulo”
Cayetana Aljovín, excanciller del Perú y presidenta de la Sociedad Nacional de Pesquería, afirmó que “el establecer asambleas constituyentes está en la receta del Foro de Sao Paulo”.
“Leamos el Foro de Sao Paulo. Es como un recetario de que lo que hay que hacer para volvernos un régimen totalitario. Ya los peruanos estamos advertidos, hemos revisado los temas y sabemos que una asamblea constituyente no es el camino”, declaró en el programa 20/21 de Canal N.
Aljovín acotó que el Perú necesita “paz, estabilidad y crear consensos” para hacer frente a la crisis sanitaria, económica y política, remarcando que “el crecimiento es la mejor inclusión” y para ello se necesita de un conjunto de personas e instituciones para darle tranquilidad y estabilidad al país.
El camino a la Asamblea Nacional Constituyente
Según Juan Carlos Puertas, abogado por la Universidad de Lima y máster en Argumentación Jurídica por la Universidad de Alicante, el presidente de la República no tiene la atribución constitucional de convocar un referéndum respecto de una Asamblea Nacional Constituyente, y si lo invoca, no tendría valor jurídico.
No obstante, debido a los precedentes del último Tribunal Constitucional (TC) vigente, Castillo eventualmente podría someter a cuestión de confianza -mecanismo constitucional por el cual el Poder Ejecutivo puede consultar al Congreso de la República sobre el tema que estime conveniente, si aún cuenta con su confianza para seguir gobernando- la aprobación de una ley para que el parlamento llame a referéndum y pregunte a la población si desea una reforma total de la Constitución.
“El presidente no puede llamar a referéndum para modificar la Constitución directamente. Sin embargo, gracias a los precedentes de este nefasto Tribunal Constitucional, que ha destruido el balance de poderes, Castillo eventualmente podría someter a cuestión de confianza la aprobación de una ley para que el Congreso llame a referéndum y pregunte a la población si desea una reforma total de la Constitución. Y lo más probable es que logre su objetivo. El ala dura de la derecha, que son Fuerza Popular y Renovación Popular, no alcanza la mayoría por sí sola para hacer oposición a los radicales. Las bancadas del centro, como Avanza País, Alianza para el Progreso o Acción Popular, se han caracterizado por su tibieza y conveniencias partidarias. Jugarse varias denegatorias de confianza, que puede terminar con el cierre del Congreso, va a estar complicado. Si el Congreso anterior, el del 2016 al 2019, le siguió el juego a Vizcarra y se puso de rodillas, este, que todavía es mucho más variopinto, puede que siga el mismo camino. Si asume Pedro Castillo, el camino a la Asamblea Nacional Constituyente está abierto, y en ese escenario, el Congreso debe hacer consenso para reformar y reconstruir todo el aparato de justicia electoral que nos garantice un referéndum transparente”.
