El presidente de Ecuador y exvicepresidente correísta, Lenín Moreno, ha confirmado que pedirá información al Gobierno colombiano sobre la presunta financiación de la campaña del candidato a la presidencia Andrés Arauz por parte del grupo terrorista de izquierda autodenominado Ejército de Liberación Nacional (ELN).
Moreno ha indicado que pedirá detalles al respecto a su homólogo colombiano, Iván Duque, después de que la revista ‘Semana’ sacara a la luz unos archivos de Andrés Felipe Vanegas Londoño, alias ‘Uriel’, uno de los líderes del ELN que fue abatido el pasado mes de octubre por Fuerzas Especiales del comando de las Fuerzas Militares colombianas.
Dichos documentos, que han sido analizados por la Inteligencia colombiana, apuntan a que el ELN financió con 80.000 dólares (unos 66.000 euros) la campaña de Arauz, según informaciones del diario ‘El Telégrafo’. Además, los archivos sostienen que ‘Uriel’ mantuvo conversaciones con el corrupto expresidente ecuatoriano y principal apoyo de Arauz, Rafael Correa, fugado en Bélgica y miembro activo del Grupo de Puebla en el que están, entre otros, la ministra española Irene Montero y el expresidente español José Luis Rodríguez Zapatero.
Moreno ha resaltado que durante su gestión al frente de Ecuador se ha «combatido» a grupos irregulares y su actividad ilícita, entre ellas el narcotráfico y ha recordado que antes «había una franja en la que (esos grupos ilegales) actuaban con total libertad».
En este sentido, ha descartado tajantemente cualquier tipo de intromisión por parte del Gobierno colombiano en las elecciones generales previstas para este domingo, 7 de febrero. «Iván Duque es una persona transparente y libre. No. No lo está haciendo. Ni él lo haría ni nosotros lo permitiríamos», ha defendido.
El mandatario ha explicado que la presencia del ELN, que cuenta con una delegación permanente en Cuba, se hizo evidente en Ecuador en el contexto de las movilizaciones de octubre de 2019, cuando «correístas, más gente que sabía perfectamente de guerrilla urbana, se aprovecharon de un legítimo levantamiento por parte del movimiento indígena y provocaron caos bajo la pretensión de que el Gobierno sea destituido».
Moreno ha hecho hincapié en que son las autoridades, electorales; y luego las judiciales, las encargadas de investigar el caso con absoluta independencia de funciones. «Se acabaron las épocas en que se sentenciaba a través de una sabatina«, ha recalcado.
